61

1.5K 202 169
                                    

Joel

Observo el techo de la habitación pensando en absolutamente todo.

El hecho de que en unas horas el chico ojiverde dormido a mi lado ya se deba de ir.

Él, a causa del cansancio, a logrado dormirme. Ahora... yo no puedo hacer eso.

Me duele, me duele tanto que algunas lágrimas aparecen en mis ojos, pero me obligo a mí mismo a no llorar.

Esta vez será distinta a la anterior.

Miro a mi lado al chico y sonrío levemente, dormido irradia tanta paz, todo su cuerpo es una escultura de arte para mí.

Agarro las sábanas y tapo las partes que aún quedaron descubiertas, ya que no quiero que se enferme.

Me levanto de la cama con cuidado recordando cuando todos se fueron del apartamento prometiendo estar en el aeropuerto.

Agarro el boxer que quedó en el suelo y suspiro colocándomelo, para luego así encaminarme al armario.

Elijo mi vestimenta para dormir allí y me adentro en el baño para tomarme una ducha.

Ya bañado y vestido, me observo en el espejo, no es mi primera vez con Erick, ya hemos tenido muchas antes, pero... esta fue incluso más especial que las demás.

Ambos sabemos que no nos veremos por un tiempo, y aunque nos duela, es la realidad.

Pienso en decirle todo lo que siento, pero cada vez que lo intenté en el día, ninguna palabra salió.

Entonces... una idea aparece en mi mente.

Salgo del baño y miro hacia la cama notando como el ojiverde aún se encuentra dormido, sonrío y salgo de la habitación.

Me encamino hacia la sala y allí prendo una lámpara, agarrando a si de la biblioteca un book y un lapiz.

Comienzo a escribir todo lo que siento, y en ello, el pequeño secreto que le estuve ocultando al ojiverde.

Una sonrisa vuelve a aparecer en mi rostro cuando doblo la hoja y la pongo en un sobre, terminando así con la carta.

La alarma nos despierta bastante temprano, a pesar de que el vuelo del ojiverde sea más tarde aún.

Noto como Erick, aún encontrándose dormido y con los ojos entrecerrados, se comienza a levantar de la cama.

Yo por mi parte me le quedo viendo desde mi lugar, con una sonrisa pícara.

Erick parece notarlo, por lo cual con las mejillas enrojecidas oculta su cuerpo con la sábana y se encamina hacia la maleta ya hecha con su ropa, sacando así la vestimenta que usará este día.

Lo veo desaparecer cuando se adentra en el baño y río.

Me levanto de la cama y agarro la carta que dejé adentro de la cómoda, procurando así guardarla en el bolsillo de mi pantalón a penas me cambie.

Cuando lo hago simplemente me encamino a la cocina del apartamento y comienzo a preparar el desayuno.

A penas Erick aparece, ya completamente vestido, mi corazón se paraliza por unos segundos de lo lindo que se ve.

Mi Vecino || JoerickWhere stories live. Discover now