Capítulo 26

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Narra Aitana

Me despierto con un ligero dolor de cabeza.

Maldigo a Amaia y su capacidad de convencerme de seguir bebiendo hasta no recordar nuestros nombres.

Estiro mi brazo para alcanzar mi móvil y tras tocar un botón se ilumina la pantalla.

15:34

Agradezco al cielo que hoy sea sábado y no tener que trabajar en la tienda.

Me incorporo un poco en mi cama y entro a whatsapp. Le contesto un par de mensajes a Amaia y luego entro a la conversación con Luis

Luis

5:50 am

Descansa pequeña. Sé que probablemente lo veas cuando despiertes pero da igual. En un rato salgo para Galicia, te aviso cuando llegue.

Yo te quiero más.

Sonrío. Hago un rápido cálculo mental y me quedo tranquila al llegar a la conclusión de que Luis no debería de llegar hasta dentro de hora y media.

- Hombre, ya pensaba que tendría que ir a despertarte yo misma – dice mi madre al verme entrar a la cocina.

- Buenos días, Mama – la saludo con un beso

- Buenas tardes, cariño. – ríe

Almuerzo algo mientras mi madre se prepara unas tostadas con café y me cuenta que dentro de unas semanas quizás deba hacer un viaje de trabajo.

Mi madre solía viajar al menos cuatro veces por año a Madrid para reuniones importantes. Samantha y yo nos quedábamos con papá y la primera noche sin mamá siempre pedíamos unas pizzas y veíamos alguna película juntos.

De más está decir que desde el accidente mi madre ha evitado cualquier tipo de viaje porque no quiere dejarme sola. Y la entiendo. Desde que sucedió no he podido evitar cambiar drásticamente pero, sé que estoy mejorando. Estoy sanando. De verdad.

- Pero, trataré de no ir, no creo que sea indispensable – dice

- Por mí no te preocupes, eh – advierto – además, que te vas a Madrid tres días, no es nada.

- ¿Estás segura? No quiero dejarte aquí sola...

- Mama, sé cuidarme sola y además tengo a Amaia – puntualizo.

- Y a Luis... - dice levantando las cejas.

- ¡Ay, Mama! – me quejo.

- Lo siento, lo siento.

Hablando de Luis decido chequear mi móvil a ver si me ha escrito.

Pero nada aún.

Aitana

Holi, ¿has llegado?

Vuelvo a bloquear el móvil y decido ir a mi cuarto a ver una serie mientras espero que Luis aparezca. Me acuesto en mi cama y pongo el ordenador sobre mis piernas mientras le doy clic a Vis a Vis. La verdad es que empecé la serie hace unos meses pero siempre me olvido de seguirla.

Al terminar el capítulo vuelvo a agarrar el móvil.

17:26

Joder, tendría que haber llegado ¿no es así?

Aitana

Luisss

Esta vez solo hay un solo tic. No lo recibe.

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