O2O

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  El fuerte sonido de una alarma hizo que Felix abriese sus ojos abruptamente, interrumpiendo su preciado tiempo de descanso. Se frotó los ojos y miró a un lado, donde estaba la camilla de Hyunjin, encontrándose con el mayor mirándolo atentamente.

—¿Jinnie? ¿Sabes por qué nos despertaron... —miró el reloj que estaba en la pared, marcaba las 7:00 am. — tan pronto...?

—Ni id- —el sonido de las puertas abrirse interrumpió las palabras de Hyunjin, encontrándose con la profesora Dami.

—Chicos, hay una reunión importante dentro de media hora, comer y asearos un poco. Para llegar al sitio simplemente solamente tenéis que ir por el pasillo, recto. —habló la mujer mientras dejaba las bandejas en una pequeña mesa y señalaba una puerta grisácea, Felix supuso que era el baño.  —Sentiros agradecidos de que podéis usar el baño privado, estar enfermo no trae tan malas consecuencias, eh. Dentro tenéis lo suficiente para estar limpios, no quiero quejas de que falta algo.

Los dos chicos asintieron y no se movieron hasta que la profesora salió. A pesar de haber hablado con un tono amable Felix no podía evitar sentir que emanaba tristeza e incluso terror.

—Yo voy primero a lavarme, tu ve desayunando. —dijo Hyunjin.

Felix asintió y se acercó a coger la bandeja, agarrando primero la manzana y dándole un buen mordisco. Se sentía con mucha más energía que el día anterior, tenía bastantes agujetas pero nada que no hubiese sentido antes. Era realmente un alivio sentirse mejor, el día anterior había temido por su salud.

Aunque había sentido más miedo por la de Hyunjin, que se encontraba en peor estado. Aquellos fuertes golpes en la cabeza lo habían dejado fatal, además de la gran cantidad de sangre que perdió. Pero hoy realmente se veía mejor.

Cuando él terminó de comer y Hyunjin de lavarse intercambiaron puestos. Él tomó una ducha y se aseó, luego de salir Hyunjin volvió a entrar para lavar también sus dientes. Él lo esperaba sentado en una de las sillas.

—Incluso nos dieron ropa nueva eh. Aunque es bastante fea. —dijo Hyunjin mientras salía y hacia un gesto de cabeza hacía la puerta, indicando que podrían ir.

—Al menos es cómoda. —habló Felix, Hwang asintió.

Lo que les habían dado para vestir era como un uniforme, completamente negro, incluso los zapatos lo eran. El traje es bastante holgado y Felix se sentía agradecido por esto, nunca se sintió demasiado cómodo en la ropa ajustada.

Siguieron las indicación de Dami y caminaron por el pasillo. El búnker tenía las paredes blancas y desgastadas, el suelo era de cemento y lleno de polvo. Felix no pudo evitar recordar el pasillo de la casa, había una marcada diferencia.

Llegaron al fondo del lugar, entrando a una habitación realmente amplia. A Felix le sorprendía lo grande que era aquel lugar para ser un búnker y se dio cuenta de que realmente estaban preparados para este momento.

El lugar tenía las paredes igual que blancas que el pasillo, el suelo también era de cemento solo que estaba algo más limpio. Bueno, aunque lo último no lo podía asegurar pues la habitación estaba llena de todos los indeseados.

—¡Hyunjin, Felix...! Por aquí. —ambos escucharon la voz de Jeongin llamándolos, nada más verles se acercaron rápidamente. —¿Cómo estáis?

—Bien, Innie, no te preocupes. —respondió Hyunjin mientras acariciaba la cabeza de su hermano menor. —¿Y donde están los demás? Solo somos ocho.

—Beomgyu y Taehyun fueron a hablar con unos chicos, dijeron que hacía tiempo que no hablaban desde todo lo del grupo y decidieron ir. Sowon, Eunha, Jihyo y Sana hicieron lo mismo. Luego Jimin y Yoongi les siguieron, aunque creo que a Yoon hyung le obligaron. Seoho y Leedo hicieron lo mismo después de que Seoho viese a un amigo. —explicó Changbin. —Con todo esto de que nos juntamos con la misión se alejaron bastante de sus otros amigos.

la casa de los indeseados || hyunlixWhere stories live. Discover now