17

2.1K 85 79
                                    

[Tú necesitas a alguien que en vez que te quite, aporte y que de solo besarte a otro mundo te transporte]

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

[Tú necesitas a alguien que en vez que te quite, aporte y que de solo besarte a otro mundo te transporte]

Hasta la Fer, que ni tomaba demasiado estaba muerta de curada, con el Charles se burlaban de todo y recrearon la escena de cuando tuvieron al Renato, fue demasiado chistoso y no quería reírme mucho, sentía que el bebé se iba a caer.

Erick también había tomado caleta pero ahora estaba durmiendo en mi hombro, igual se había cansado, lo que manejó fue harto. Al rato nos fuimos a acostar, me costó un poco levantarlo porque seguía medio dormido. Me lo llevé a la pieza con ayuda del pololo de la Cami y lo dejamos recostado en su cama.

—¿Te ayudo?—me preguntó.

—No, yo me encargo. Muchas gracias—asintió con la cabeza y salió de la habitación.

Le saqué la chaqueta y en un acto rápido me jaló hacía él para según yo, dormir juntos.

—No quiero lastimarte, Maite—murmuró—No quiero hacerte más daño.

—No lo harás, Erick—besé su frente y él abrió los ojos para mirarme por algunos segundos—Tranquilo.

—No sabes cuánto me odio por haberte hecho sufrir tanto.

No le dije nada, solamente guardé silencio porque era obvio que estaba durmiendo y seguramente no se acordaría nada mañana en la mañana. Se removió inquieto, se abrazó a mi abdomen y fue como si hubiera encontrado la comicidad máxima.

—Yo te amo, Maite. Te amo como no tienes idea y cuento los días para que estemos los tres juntitos.

Le sonreí mientras sentía como cada vez mi ojos pesaban más y más.

Me quejé un poco cuando noté que el sol me estaba dando en toda la cara. Fruncí el ceño y lo primero que vi fue la espalda tatuada de Erick, estaba sentado casi a los pies de la cama. Al notar que me moví, se giró hacia mi, se subió por la cama y me dio un beso. Tenía el pelo demasiado mojado, llegaba a gotear. Su cuerpo estaba demasiado helado y me gustaba.

—Buenas días, hermosa.

—Buenos días—contesté.

—¿Estás segura que no quieres irte conmigo?

Hizo un puchero y puso cara de pena, como si con eso lograra que me fuera con él. Negué con la cabeza.

—Ya le dije al Charles que me quedaría hasta el diez.

—Iré a hablar con la Rena en cuanto llegue, iremos si o si, ¿verdad?

—Si, claro. ¿Cuanto más va a esperar para decirle a tu mamá?—pregunté.

Se encogió de hombros.

—No sé si te acuerdas, pero ayer estábamos en video llamada con el Gary y le dijiste que seríamos papás, ¿crees que pueda guardar el secreto? Al menos por un tiempo, cuando decidamos hacer todo público.

Ill be loving you forever || Erick Pulgar #LTIA2 Where stories live. Discover now