Capítulo 22

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Llevo mis manos a su cintura y empiezo a mover suavemente mis labios sobre los suyos. Jungkook no reacciona al principio, pero enseguida toma mi rostro entre sus manos y corresponde al beso, provocando una sacudida en mi interior. Aprieto mi mano al costado de su cintura haciendo que un pequeño gruñido salga de su boca aún sobre la mía.

No puedo controlarme, el lobo dentro de mí empieza a gruñir pidiendo por más y mi mente se nubla ante cualquier otra cosa que no sea Jungkook. Más que un deseo se siente como una necesidad.

El suave beso enseguida se transforma en uno feroz, hambriento. El vampiro lleva sus manos a mi cabello y empieza a acariciar suavemente allí logrando que la poca cordura que me quedaba desaparezca por completo. Mis caricias sobre sus costados hace que el pelinegro suelte pequeños gemidos obligándole a abrir su preciosa boquita y logrando que sin pensarlo yo introduzca mi lengua en ella con el único propósito de tener más contacto con él.

Nunca antes había dado un beso como este, pero me gusta, me encanta, adoro sentir su lengua topándose con la mía. Lo necesito más cerca, necesito más de él. Me subo encima suyo rodeando mi cintura con sus piernas.

Me separo de sus labios solo para repartir varios besos en su cuello, mordisqueándolo en algunas ocasiones.

"Mío"

Escucho una voz dentro de mi cabeza y lo identifico inmediatamente como mi lobo. Puedo sentir lo que esa parte de mí siente y sé cuánto desea encajar los colmillos en la piel expuesta de Jungkook. Aquello me parece extraño y absurdo puesto que el vampiro es él, no yo. Además si lo muerdo podría lastimarlo. ¿Qué sentido tendría morderlo y por qué mi lobo lo desea con tal urgencia?

Por más que me caiga mal el vampiro no voy a lastimarlo, lobo tonto.

Las manos del pelinegro suben un poco la camisa que llevo puesta y empieza a acariciar mi espalda, moviedo suavemente sus manos sobre mi piel. Vuelvo a besar su dulce boca mientras mis manos se infiltran también bajo su camisa, sintiendo su piel desnuda bajo mi tacto.

Paso mis palmas lentamente sobre su torso mientras el beso demuestra​ qué tan hambrientos estamos el uno del otro. Jungkook muerde suavemente mi labio inferior provocando que un gruñido salga de mi garganta. La excitación que experimento llega hasta tal punto que empiezo a realizar pequeños movimientos pélvicos sobre su entrepierna. De repente la ropa me parece una​ molesta interferencia entre nosotros. Subo su camisa con la intención de quitársela pero el proceso me parece demasiado lento. En un acto de desespero mi lobo me obliga a arrancársela de un solo tirón dejando al vampiro expuesto ante mí.

Después de hacer aquello Jungkook se separa bruscamente de mí. Me mira y luego se gira sobre sí y me acuesta en la cama, de modo que ahora es él quien está encima de mí con sus piernas a mis costados.

La escena me parece tan erótica que no puedo evitar imaginarme todo tipo de cosas que podría hacer con él. Sin embargo, él parece no opinar lo mismo. Jungkook sonríe burlona y maliciosamente mirándome desde arriba.

ㅡ¿Te dije o no te dije que los hombres lobos se dejan llevar por sus instintos? Fueron solo unos besos y mira cómo estás. Eres un animal, acabas de destrozar mi ropa. Si quisiera podría seducirte, usarte y tirarte y sería tan fácil. Tú eres fácil. Todos ustedes son así. Es desagradable. ㅡSigue sonriendo después de decir todo aquello y se acerca dejando un beso sobre mis labios. ㅡNo importa, si quieres puedo cumplir tu deseo. Juguemos a que tú eres mi mascota y yo tu dueño. Puedo controlarte como quiera.

Lo empujo y me levanto rápidamente de la cama sorprendido y molesto, en parte con el vampiro y en parte conmigo. ¿Qué demonios me pasó? ¡Estuve a punto de acostarme con él! Y es que no sé cómo pero su aroma... era tan intenso que casi pierdo el juicio.

The King ◇TaeKook◇Where stories live. Discover now