My Hetero Crush |T.K| ✔

9. El beso

Taehyung

La casa de Jungkook estaba vacía cuando llegamos, por lo que el lugar me pareció más enorme que si hubiese habido gente.

Lo primero que noté fue el cachorro blanco que vino a saludarme en la entrada. El can no dejó de olerme los zapatos así que tuve que explicarle a Jungkook.

— También tengo un perro en casa, siempre duerme sobre mis zapatos así que debe tener su olor — comenté viendo a Jungkook a los ojos, éste me miraba esperando algo, o quizás con admiración, sea como sea no supe descifrarlo.

—Descuida, hace eso con todo el mundo. —Jungkook dejó su abrigo colgando del perchero y yo le pasé el mío —mi habitación es la primera del pasillo.

La casa de Jungkook no tiene escaleras para un piso de arriba sino que es en su totalidad un lugar enorme con un largo pasillo.

Cuando entramos a su habitación lo primero que llama mi atención son la cantidad de instrumentos musicales que tiene, aparte de que su cuarto es inmenso.

—Wow... —es lo único que me sale de la boca. Nunca imaginé que Jungkook tocara el piano, la guitarra, el violín y... —¿Estas partituras las hiciste tú?

—Sip... Amo la música así que también la hago.

—¿Acaso eres un genio? —le pregunté riendo, pero al parecer eso provocó que se ruborizara.

Ah, caramba, ya me estoy acostumbrado a ver esas reacciónes que yo causo en él y no debería tener que tomar eso por costumbre.

—¿Tae, te importa si voy a ducharme y luego ensayamos? Hoy mi curso tuvo gimnasia y estoy todo sudado, lo detesto en verdad.

—No hay problema, Jungkook.

Él me sonrío desde la entrada antes de tomar prendas nuevas y salir rumbo al cuarto de baño.

Minutos después de escuchar el agua correr, su mascota vino y se subió a la cama, yo lo saqué porque no sabía si Jungkook lo permitía y el perro tuvo que conformarse con colocarse sobre un almohadón.

Se que no debería hacer esto pero no me contuve al momento de abrir la tapa del piano de pared y comenzar a tocar.

Jungkook no lo sabe, pero yo también sé tocar el piano. Tenemos más cosas en común que diferencias.

. . .

Estaba a punto de terminar mi tercera canción cuando escuché el crujido de la puerta abrirse. Jungkook me estaba mirando desde la entrada con los labios entreabiertos y el cabello negro largo y rizado cayéndole mojado sobre los ojos. Su ropa negra se le ajustaba al cuerpo y mi instinto no pudo contenerse para verlo de refilón

—¡Wow, Taehyung, tocas muy bien!

—Gracias... Lo heredé de mi abuelo.

—Yo de mi papá —me comentó con una sonrisa y luego cerró la puerta tras de si.

Me percaté que en su mesa de luz tenía una foto con sus dos amigos y me pareció un bonito detalle.

—¿Sabes tocar todo esto? —le pregunté algo incrédulo pero maravillado. Me levanté del piano para buscar el libreto mientras que Jungkook se secaba el cabello con la toalla.

—Si, el piano desde que soy pequeño y con la guitarra empecé hace dos años.

—Oh... —levanté la vista del libreto unos segundos para ver sus hombros moverse con agilidad, luego él se volvió a verme. —¿Y el violín?

—Ah, eso hace una semana ¡Es tan difícil! —se quejó sentándose en la cama y agarrando su libreto para repasar las líneas —creo que el violín suena muy diferente a lo que se escucha en los vídeos de YouTube.

—Si, puede ser.

—Juro que a veces se me rompen los tímpanos —Dijo él riendo, yo también rei bajito.

La risa de Jungkook suena tranquilizante en un ambiente como éste. Todo el cabello le cae por los ojos, tapándole su vista y no puedo evitar que mi mano se dirija a esos mechones de cabello revoltoso.

Cuando me quiero dar cuenta de lo que estoy haciendo ya es demasiado tarde y no tengo excusa que decirle.

Jungkook se me queda viendo al momento de colocarle ese mechón detrás de la oreja y yo me quedo estático con la mano en ese mismo lugar.

Su piel... Es tan suave como la de un bebé.

—¿Tae?

Lo observo sin saber muy bien que decirle o que hacer, así que solo me atrevo a dejar la mano ahí.

—Deberías recoger tu cabello en una coleta...

¿Por qué no quiero dejar de tocarle el cabello?

Jungkook me está mirando con atención y este momento es lo único que parece importarnos.

—Deberíamos... Ensayar. —es lo único que alcanzo a decir antes de quitar mi mano de su cabello. Jungkook me mira algo desconcertado por la falta de mi tacto.

Y lo malo es que a mí también me hubiera gustado quedarme así y lo peor es que no se por qué.

. . .

Jungkook golpeó mi pecho con algo de fuerza, su actuación es bastante buena.

—¿Acaso no lo comprendes? — fingió llorar —¡Cada vez te llaman de más trabajos, más desfiles, más secciones de fotos! ¡¿Cuando vas a tener tiempo para mí, para nuestra relación?! — me arrebató el celular de las manos mientras yo actuaba bastante agobiado en la entrada de la "casa" (que vendría a ser su cuarto) hasta ahora me sigo preguntando cómo es que en la obra van a usar una puerta de escenografía.

—Ya, amor... —mi personaje intentó acercarse a él primero para sacarle el celular, pero luego tuve que rendirme al ver que él no iba a devolverlo, entonces volví a decir mis líneas —escúchame, todo lo que hago es para que tengamos un futuro mejor y podamos...

— ¡Todo lo que haces pareciera como si nada! ¡No hablas conmigo y te la pasas todo el día atendiendo llamadas! ¡Ni siquiera recordaste que hoy es mi cumpleaños!

Mi personaje tiene que sorprenderse, por lo que se me ocurrió entreabrir los labios y observarlo con agobio.

— Yo... — mi línea termina ahí y él debe fingir gritarme a continuación.

—¡Ni siquiera me prestas atención como para recordar mi cumpleaños! ¡Eres un desastre...!

Entonces yo ahora debo...

—¿Jungkook sabes la escena que sigue verdad? — le pregunto saliendo del papel

—Si... ¿Tú quieres hacerlo? ¿Estás seguro que esto no te molesta? — ¿Cómo le explico que en realidad soy gay, que no me molesta tener que besarlo?

—Hay que actuar Jungkook. Di tu última línea.

Él asiente con la cabeza y vuelve a hablar.

—¡Eres un desastre...!

Yo debo cortarle la palabra y entonces me acerco a él, actuando con desesperación. Lo tomo de la cintura y entonces lo beso.

Oh mierda, el latido de mi corazón no está actuando.

Mierda, mierda, mierda.

¿Cuánto tiempo llevaba deseando esto en verdad?