- Capitulo 1 -

17K 1K 70
                                    

CAPITULO 1

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

CAPITULO 1

Estaba preparando el almuerzo para mí y para Erick, mi hermano gemelo. Bueno, eso si es que puedo llamarlo mi gemelo, porque ambos somos muy distintos cuando de la personalidad refiere.

Él, por un lado, es simpático y extrovertido, y nunca le costo crear vínculos con las personas, y yo, por el otro lado, no puedo decir lo mismo, porque nunca fui buena encajando con las personas, y sin ningún tipo de vergüenza puedo decir que soy introvertida y que en algunas ocasiones suelo cerrarme emocionalmente.

Con respecto a nuestros padres, es un poco complicado, ya que mi padre, Sergio, era un vampiro de 439 años que nunca había tenido relación con nadie más a excepción de su hermana, que por lógica es mi tía, y que además de eso es una vampira con una habilidad extraña. Por otro lado, esta mi madre, que se llamaba Erika y era una humana que impugnaba la idea de dejar de serlo, ella era un alma libre y pacifista, motivos por los cuales no accedió a dejar su mortalidad por nuestro padre, el punto es que tuvieron una relación de película hasta que ella quedo embarazada de gemelos y nos trajo al mundo.

Pero como la vida no es perfecta, el embarazo y parto de mi madre tuvieron altercados.

El problema empezaba cuando yo había nacido, y ahora se preguntan cuál es el problema de eso, pues resulta que nací como una niña inmortal, y mi hermano como un simple humano. Pero mi padre se percató de que algo extraño estaba pasando y llamo a mi tía. En pocas palabras, mi tía mesclo nuestras escancias para que seamos mitad humanos, mitad vampiros, y de esa forma poder vivir sin problemas, motivo por el cual mi hermano y yo somos inseparables. Eso además de que desde niños nos cuidábamos mutuamente.

- ¡Erick! - lo llame mientras ponía la comida en la mesa. Porque si, podíamos comer cualquier cosa humana mientras también consumamos una cantidad de sangre cada determinado tiempo. Aunque personalmente prefería la sangre. 

Un ruido que provenía de la escalera me saco de mis pensamientos, y cuando me gire para verlo me percate de que solo tenia puertos unos pantalones de entrecasa. Siempre era lo mismo, él nunca se molestaba en vestirse completamente en mi presencia, aunque realmente no me molestaba, ya que no había nada que no supiera de él.

Él me sonrío como normalmente siempre hace y se sentó en frente mío.

-Bien, ¿Con que planeas envenenarme hoy? -me pregunto divertido y yo lo mire molesta. - Bien, se nota que yo nací con todo el carisma y tu solo te quedaste con la cara de mono. - dijo riéndose y yo rodé los ojos dejando escapar una sonrisa muy leve, ya que era verdad, Erick siempre fue el alma de la fiesta, mientras que yo... bueno yo soy yo.

-Solo cállate y come. - le dije empezando a comer los espaguetis que había preparado, pero no pude evitar hacer una mueca de asco al probarlos. - No, sabes que, mejor pidamos una pizza. - le sugerí haciéndolo reír divertido.

I Give You Life - Paul LahoteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora