Nicole Anderson es una hibrida que junto con su hermano Erick, deciden ayudar a la familia Cullen cuando está esta en problemas con la "Realeza" a causa de una pequeña, que por lo visto, también era hibrida. Pero Nicole no esperaba que cierto lobo...
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Capitulo 28
Pov. Paul Lahote.
La tenia entre mis brazos fuertemente abrazada, y esto se debía a que en unas horas ella se iría por no se cuánto tiempo, algo que claramente me inquietaba, porque desde que la marque no la quiero lejos de mí, incluso no quiero que nadie la toque.
Mi pequeña era mía y nadie tendría por qué tocarla.
-Estas muy tenso. - me dijo acariciándome el pecho. - Todo va a salir bien, y cuando todo este como antes no saldremos de la cama. - me dijo juguetona y yo gruñí por lo placentero que eso sonaba.
-Me gusta cómo suena eso, pero no entiendo porque mierda tengo que esperar para hacerte mía otra vez. - le dije dando la vuelta y besando su hermoso y tentador cuello, justo donde mi marca descansaba en su tersa piel. - No quiero que te vallas. - le insistí, aunque era claro que no era algo que ella pudiera elegir.
-Yo tampoco quiero irme. - me confeso acariciando mi pelo mientras yo rosaba su cuello con mi nariz. - Pero acepta que es lo mejor. - me dijo alejándome un poco para verme a los ojos.
-Lo sé, pero no te quiero lejos. - le confesé dejándome caer en la cama mientras ella se acostaba devuelta en mi pecho.
-Ya veras que todo pasa de manera rápida. - me prometió sentándose en la cama al ver la hora. - pero ahora me están esperando abajo, así que, si no te molesta, quita tus brazos de mi cintura. - me dijo sonriendo ampliamente, y cuando me di cuenta de que la estaba sujetando contra mi cuerpo solté un gruñido de rendición mientras la dejaba ir. - Nos vemos en uno o más días. - me susurro besándome levemente en los labios mientras se ponía un pantalón.
Cuando ya estaba lista me levante y la volví a abrazar para besarla con ansias, pero a los segundos tuve que separarme porque su hermano estaba tocando la bocina de su auto.
-Cuídate y llámame cada dos horas. - le dije soltándola y ella me sonrió ampliamente, aunque era obvio que estaba nerviosa y preocupada, pero algo que había aprendido de ella era que sabía esconder sus emociones. - Te amo nena. - le dije sonriendo de lado esperando a que se dé la vuelta para darle una nalgada en su hermoso trasero que sin dudas era todo mío.
-Yo también te amo nene. - me dijo lanzándome un beso y saliendo de la casa, dejándome solo.
Una hora después ya estaba preocupado y aburrido, esta casa sin ella era una mierda así que simplemente me fui a la de Sam donde estaban algunos de mis hermanos hablando, pero cuando me vieron me miraron con comprensión.
- ¿Ya se fue? - me pregunto Collin viendo cómo me dejaba caer en el sofá junto a ellos, pero como no estaba de humor solo asentí soltando un leve gruñido. - Tranquilo, seguro todo va a ir bien. - dijo intentando levantarme el ánimo, y de verdad se lo agradecía, pero todos sabíamos lo que podía pasar.
