Nicole Anderson es una hibrida que junto con su hermano Erick, deciden ayudar a la familia Cullen cuando está esta en problemas con la "Realeza" a causa de una pequeña, que por lo visto, también era hibrida. Pero Nicole no esperaba que cierto lobo...
Ups! Tento obrázek porušuje naše pokyny k obsahu. Před publikováním ho, prosím, buď odstraň, nebo nahraď jiným.
CAPITULO 3
Apenas llegamos a la casa me quede impresionada con lo moderna y amplia que era, sobre todo teniendo en cuenta que se encuentra en un lugar tan alejado. Después de analizar un poco la hermosa casa, nos sentamos en el salón donde hablamos un poco y respondimos algunas de las preguntas que tenían sobre nuestra forma de vida, pero al percatarse de que estábamos cansados, nos dejaron dos habitaciones donde no dude en lanzarme a la cama para dormir profundamente.
Pero en medio de la noche se escuchó un aullido que me hizo estremecer, y a causa de eso, perdí el sueño. Suspiré un poco estresada y salí de la cama para asomarme por la ventana donde pude ver al lobo de esta mañana, y cuando iba a acercarme él se desapareció entre los árboles dejándome con mil dudas, pero preferí dejarlo ir y darle tiempo.
Bajé al piso de abajo y vi a uno de los Cullen, que creo que se llamaba Emmet. Estaba jugando videojuegos y no pude evitar querer provocarlo un poco. Según Jasper, él es muy competitivo, y no creo que jugar un rato valla a matarme, después de todo hace mucho que no lo hacia.
-Realmente eres malo en eso. - le dije con una sonrisa divertida, a lo que él me miro con una ceja alzada y me respondió sin vacilar.
-Bueno, si fuiste capaz de decir eso, supongo que también lo vas a ser para aceptar un desafío. -dijo lanzándome uno de los controles que tome con habilidad mientras me sentaba en el mismo sillón. Estuvimos jugando durante unas horas en las cuales nos reímos y pasamos un buen rato, incluso Esme me alcanzo algo para desayunar en medio de uno de los juegos. Sin duda eran una familia encantadora.
Pero sin ser consciente las horas pasaron hasta que ya casi era medio día, y solo me percate de eso porque por la puerta de entrada llego Edward y un chico moreno que tenia a la pequeña Renesmee en brazos, mientras ella le contaba las cosas que había hecho en el día, pero lo que me sorprendió fue ver con el cariño con la que el joven.
-Nicole, él es Jacob, estuvo ayer con nosotros. - me presento y yo lo mire unos segundos y si, era uno de los lobos. Ese característico olor a podrido lo delataba. Edward soltó una leve risa, y lo ignore suponiendo que era por andar husmeando en mi mente. - Lo siento. - se disculpó y yo negué despreocupada.
-No importa. - me limite a decir viendo como los chicos nos miraban curiosos. - Mucho gusto Jacob. - lo salude con una sonrisa de cortesía mientras dudaba entre preguntarle o no sobre mi compañero.
-Puedes preguntar, para eso vino. - dijo Edward llamando la atención del moreno que después me miro a mi con una sonrisa.
-Si, aunque en realidad solo vine para llevarte a la casa de Sam. - me dijo dejándome confundida por la persona que había nombrado y que claramente no conocía. - es el Alpha de la manada de Paul. - me aclaró causando que yo asintiera levemente, porque la verdad es que no se como se maneja una manada. - Ellos tienen algunas dudas y solo quieren conocerte - me dijo haciéndome alzar una ceja por lo ultimo que había dicho, porque la verdad la única persona que me interesaba conocer era a Paul.
