GARDENIA ROJA

PARTE 25

Wei Wuxian se incorporó a sus amigos.

Mientras bebían y hablaban de diversas cosas la idea de ver a Lan Qiren sin barba no se iba de su cabeza.

Después de luchar contra ella en silencio se lo dijo a Nie Huaisang y a Jiang Cheng, quienes lo alentaron para que lo hiciera.

—Wei Wuxian, esto es una apuesta. Si no lo haces tendrás que hacer algo que queramos, ahora no se me ocurre nada, estoy borracho.

Nie Huaisang reía ante la propuesta de Jiang Cheng.

Jin Zixuan llegó algo ebrio junto a un Wen Ning bastante preocupado por el estado de la mayoría.

—Jóvenes maestros es mejor que vayamos a los dormitorios.

—No hasta que Wei Wuxian afeite a Lan Qiren.

Jin Zixuan se emocionó ante la propuesta y lo alentaron.

Wei Wuxian lo decidió y fue a la habitación del mayor con unas tijeras y una navaja.

Después de entrar en silencio procedió a acercarse al mayor y con un corte rápido cortó la barba.

Al ver que éste no sentía procedió a afeitar al tío de su prometido. Habiendo hecho el trabajo con éxito corrió hacia afuera.

Todos le pagaron a Wei Wuxian, pues éste prefirió el dinero a los favores.

Corrieron a sus habitaciones antes de ser descubiertos. Cuando llegó a la propia sintió  algo de culpa al ver a Lan Wangji.

Se cambió rápidamente y se acostó al lado de su amado Jade.

Recostandose en el pecho de su prometido este sintió su presencia. Haciendo pocos ruidos para que Wei Wuxian supiera que se había despertado se acomodó y después de un beso de buenas noches ambos durmieron.

Lan Wangji despertó a las cinco de la mañana. Después de acomodar a su prometido se dirigió a sus habitaciones, pues debía tomar un baño y cambiarse.

Al salir pudo ver a Lan Xichen soltando pequeñas risas mientras escuchaba la voz furiosa de su tío.

—Hermano, ¿Qué pasa con tío?

—Wangji, tío amaneció afeitado.

Lan Wangji abrió los ojos y caminó hacia la habitación de su tío.

Al verlo se sorprendió, pues nunca lo había visto sin barba ni bigote.

—Tío, buenos días.

—Wangji, ¿Sabes si el demonio de tu prometido estuvo vagando ayer?

Lan Wangji ocultó su leve sospecha y habló.

—Wei Ying y yo estuvimos juntos hasta media noche, luego nos fuimos a dormir. Hubiera escuchado si él habría salido.

Lan Qiren dejó el asunto por un momento.

Terminó por afeitarse de manera correcta y salió a caminar para pasar un poco su enojo.

Wei Wuxian despertó a las siete de la mañana, se baño, se cambió y salió corriendo a buscar a Lan Wangji, a éstas alturas ya todos sabrían de su travesura.

—Lan Zhan, buenos días.

Lan  Wangji fue al encuentro de Wei Wuxian y lo saludo muy tiernamente.

—Wei Ying, debo preguntar algo.

—Te escucho mi Lan Zhan.

—¿Sabes si alguien más aparte de nosotros entró a la casa principal, en especial al cuarto del tío?