PARTE 27

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Wei Wuxian esperaba el tiempo de dormir más que nadie. Esa noche Lan Wangji le iba a pagar por el susto que le había dado.

—Lan Zhan, no sabes lo que te espera, dormirás en el suelo.

Lan Wangji pasó unas horas con Jin Zixuan, Nie Huaisang y Wen Ning, quienes lo retuvieron debido a que según ellos habían encontrado una nueva pareja.

Los cuatro estuvieron por dos horas escondidos entre el agua para ver a Jiang Cheng y a Lan Xichen quienes estuvieron  charlando en los muelles muy amenamente.

—Es una suerte que no tengas otro hermano Wangji-xiong o la doncella Jiang se hubiera fijado en él. Es evidente la debilidad de los hermanos de Yunmeng por los Lan.

Jin Zixuan salpicó el rostro de Nie Huaisang con agua tratando de no hacer un escándalo.

—¿Estás loco? A-Li me ama a mi. Soy muy guapo, inteligente y fuerte, no tiene necesidad de ver a nadie más. Además si eso hubiera pasado Lanling Jin y Gusu Lan habrían entrado en una guerra.

Lan Wangji sólo pudo voltear a ver al heredero Jin. —Deja esos celos.

Nie Huaisang y Wen Ning trataron de no reírse fuerte.

Después de ver que los herederos Lan y Jiang se retiraron, los cuatro cultivadores salieron del agua.

—Si seguimos a ese ritmo todos tendrán pareja.

Jin Zixuan analizaba la situación.

—En Gusu fue Lan Wangji y Wei Wuxian, En Lotus Pier Lan Xichen y Jiang Wanyin, faltas tu Huaisang. El pequeño Wen no cuenta porque su hermana nos mataría.

Nie Huaisang chilló. —No me vean así, yo estoy bien así.

Lan Wangji solo alzó una ceja y Jin Zixuan sonrió. —Lo veremos.

Todos se retiraron a cambiarse, pues estaban empapados.

—¡Lan Zhan! ¿Te caíste en el lago? Wei Wuxian y Lan Wangji se encontraron en la entrada de su habitación.

—Wei Ying, hay algo que debo contarte.
Wei Wuxian jaló a su prometido. —Primero cambiate, quítate eso mojado, te enfermaras.

Lan Wangji obedeció y mientras se cambiaba en su habitación Wei Wuxian esperaba por la noticia.

—Wei Ying...

Lan Wangji había empezado a hablar desde su supuesta habitación.

Wei Wuxian se apresuró a llegar, sin esperar ver a su Jade sin nada más que el pantalón interior.

—¡¿Lan Zhan qué demonios?!

Lan Wangji se colocó la túnica interior al ver la reacción de Wei Wuxian.

—Tu entraste...

Wei Wuxian se volteó pero veía el reflejo de Lan Wangji en un espejo —Lan Zhan, andas demasiado desvergonzado. Exijo a mi Lan Zhan tímido.

Lan Wangji no se había dado cuenta así que tardaba en arreglarse la túnica, aunque sus orejas eran de un tono muy rojo. —Tú me cambiaste.

—¿Yo? Wei Wuxian fingía inocencia.

—Si, tú. 

—Oye yo no soy quien esconde esos libros en la habitación. Wei Wuxian la verdad disfrutaba de su vista. A pesar de dormir juntos Lan Wangji se había calmado bastante a comparación de cuando estaban en Gusu y también ponía cierta distancia.

—Wei Ying, eso fue un regalo para los dos. El cuello de Lan Wangji ya estaba rojo.

—¿Quién podría regalarnos algo así?

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