Dyanna Waters - la bastarda de Jaime Lannister - siempre se sintió sola en Desembarco del Rey.
Sin saber siquiera quién es su madre, anhela conocer su herencia, pero su padre no está dispuesto a compartir.
Cuando la Guerra de los Cinco Reyes empieza...
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Se fijó la fecha del juicio, y Daenerys esperaba que finalmente se hiciera justicia con el hombre que dormía en las celdas de abajo.
Dyanna se había mantenido para sí misma entre las reuniones con su Reina, ya que las palabras de Barristan Selmy la habían cortado más profundamente de lo que se había dado cuenta. Daenerys realmente la miraba como si fuera el enemigo? Ella no lo creía, pero Barristan era ahora su amigo más antiguo - confiaba más en él que en nadie aquí en Meereen.
Alys también había estado bastante distante de su amiga, y estaba continuamente acercándose a la Reina Dragón - algo que Dyanna empezaba a envidiar. Ahora echaba de menos la compañía de la bastarda Baratheon.
Dyanna se había despertado temprano una mañana y decidió que era necesario dar un paseo por la gran pirámide. Extrañaba más y más a Rhaenyra con cada amanecer, y una parte de ella se sentía reconfortada al saber que estaban bajo el mismo sol, sin importar a donde volará su dragón.
Esa fue la mañana en que descubrió al Hijo de la Arpía - asesinado y apoyado contra la pared como si aún estuviera vivo.
Ella había gritado de miedo, porque al principio se había sentido como una amenaza, y una de las primeras en calmarla en la escena fue el ex esclavo Mossador.
Fue entonces cuando notó la sangre en sus manos.
Otro grito ensordecedor había escapado de sus labios, y los Inmaculados fueron corriendo. Arrestaron a Mossador en un instante y el consejo se formó inmediatamente.
Dyanna aún tenía la sangre del hombre sobre ella de donde Mossador había intentado calmarla. A sus ojos, el hombre todavía era inocente. No había tenido su juicio, y Mossador era un traidor. No sólo a su Reina sino a su propia gente.
Dyanna sólo tenía una pregunta para hacerle a Mossador mientras estaba delante de ellos en la sala del trono.
Estaba de pie con un séquito de Inmaculados - con los brazos atados una vez más. Había perdido su libertad.
"Por qué?" La voz de Dyanna era más fuerte ahora - tuvo tiempo para procesar sus acciones.
"Por mi Mhysa." Respondió sin dudarlo - mirando a Daenerys mientras caía de rodillas. "Querías a la Arpía muerta, pero tenías las manos atadas. Te liberé como lo hiciste con todos nosotros."
"Era nuestro prisionero - esperando su juicio." Daenerys respondió en un dialecto de Alto Valyrio - una con la que Dyanna no estaba tan familiarizada. "No tenías derecho."
"El preferiría destrozar esta ciudad antes que ver a los esclavos levantarse de la suciedad." Mossador trató de defenderse pero Daenerys sacudió la cabeza.
