Charlas en el tejado (Midas King #1 y #1.5)

Capitulo 1

Esta novela está en proceso de edición, sepan disculpar las molestias :3

Skyler

Ahora entiendo porque mi papá opina que debo ir a terapia, porque constantemente estoy pensando en subir al techo del trabajo, y tirarme al vacío. Así sin mas, sin despedidas, sin abrazos, solamente acabar con mi sufrimiento.

Bueno, tal vez estoy sobre-actuando las cosas, se me conoce por eso, pero en todos mis dieciocho años de vida, nada a salido como yo quería. Yo no quería que mi mamá nos abandonara y se fuera con un tipo como cinco años mas joven que ella, tampoco quería que mi papá perdiera su trabajo obligándonos a mudarnos con mi tía, y sus dos molestas fastidiosas hijas. Tampoco lo primero que quería al terminar la escuela era trabajar en una tienda donde vendo café a gente demasiado apresurada que no pueden vivir sin sus dosis diarias, con un estúpido y feo gorro amarillo, un delantal del mismo color con mi nombre mal escrito y un jefe gruñón.

Ahora mismo, el armario de los empleados era mi mejor escondite, nada mejor que unos sobres de café para hacerme compañía en mi solitaria vida de este momento. Cerré los ojos mientras respiraba, mi trabajo no era soñado claro esta, sin contar que hoy no fue un buen día, derrame dos, di uno equivocado, y una mujer que también estaba teniendo un día de perros, decidió que era el mejor día para gritarme todas las barbaridades del mundo por haberme confundido de orden.

La puerta del armario suena. Y escondo mi cara en mis piernas como si eso fuera a hacerme desaparecer.

—Sky, sal, debes seguir trabajando.

Suspire levantándome para encontrarme con mi jefe, un hombre demasiado enorme por todos lados, con una barba larga y de color negro. Ambos nos miramos.

—¿No puedo retirarme antes?—pregunte en un murmuro.—Tengo que ir a casa temprano y...

—Claro que puedes irte antes, te lo descontare de tu sueldo semanal, ¿Qué te parece?—dice él, decidí negar y volver al trabajo mientras escuchaba a mi jefe "no entiendo a estos chicos, todos unos sueños de volverse famosos para terminar aquí, en el mundo real".

Tire un suspiro, mientras me ataba mejor el delantal amarillo, me pellizque las mejillas y fingí una sonrisa mientras iba al cajero para empezar a atender a las demás personas que estaban empezando una gran fila.

Luego de terminar de entregar el café, trabajar horas y aguantarme a mas personas que se estaban quejando de mi tardanza, termine. Me sentí aliviada cuando me pude sacar el delantal y el gorro, aunque sabía que debía volver mañana a por ellos. Al menos una pequeña sonrisa se asoma en mis labios cuando recibo el sobre con mi paga que guardo en mi mochila y camino hacia donde están las bicicletas.

Agarro la mía que es una color azul, la vieja bicicleta de mi prima Ramona, pero cuando iba a subirme fruncí el ceño.

—¿¡Quien le pincho una goma!?—grite, mis compañeros de trabajo salieron riéndose demasiado fuerte. —Se que fuiste tu, Garret.

—Oh vamos, ¿vas a echarme la culpa de todo lo que pasa?—pregunta Garret acercándose, le eche una mala mirada mientras negaba y caminaba con la bicicleta a mi lado.—¡Al menos sirve para adelgazar esas caderas!

—Comete esta.—dije levantando el dedo del medio. Prácticamente Garret me odiaba dese que por un accidente en el trabajo, el jefe me dio mas reconocimiento por salvar la metida de pata de Garret, claro que él se lo tomo como si me hubiera burlado de él, y ahora estábamos en una pelea interminable.