Charlas en el tejado (Midas King #1 y #1.5)

Capitulo 9

Caleb

Cuando dije de mudarme a Londres, recibí mucho apoyo, tanto de mi novia, como mi hermano y mi abuela quien es nuestra fan número 1.

Pero claramente, mis padres tenían su duda. Mamá creía que era una fase, que sentaría cabeza e iría a la universidad. Papá ni estaba enterado de lo que hacía, a veces me pregunto si le importa lo más mínimo lo que Jayden y yo hacemos.

Nuestros padres son médicos y dedican su vida a viajar a todas partes del mundo para ayudar a aquellos de pocos recursos. Ahora creo que estaban en África o por ahí.

Nuestra abuela materna, Lily, nos a criado a mi y a mi hermano, porque con suerte vemos a nuestros padres pocas veces al año.

Cuestión que mis planes nunca fueron dedicarme a la banda. Me aceptaron a Oxford, con mi novia Rosie, estudiaría música. Pero una vez más, el mundo tenía diferentes planes para mí. Y no me mal interpreten, creo que ser parte de la banda fue mi mejor maldita decisión.

Y el mundo sigue siendo una caja de sorpresas para mi. Había salido a una fiesta en un club, con los amigos de nuestra vecina y, claro, Skyler. Lo último que recordaba era llorar porque extrañaba a mi novia. Sin embargo, no recuerdo en qué momento terminé en esta habitación.

El cuarto de la casa donde me mude, tenía paredes verde menta, y recuerdo poner una foto de mi abuela con Jayden y Rosie en mi mesa de noche. También recuerdo que colgué un póster de Imagine Dragons y de mi equipo de fútbol.

Pero esta habitación, tenía paredes celeste cielo, con un pentagrama en una pared. La cama tenía colchas grises y olía ligeramente a queso, mi cabeza dolía horrores, por lo que me levanto para ver mejor mi alrededor. Había una computadora encendida, y un escritorio con miles de papeles. Un estuche abierto donde había un violín color madera y partituras.

Me levante de la cama caminando al escritorio, había más partituras de una composición y dibujos de caricaturas bastante ingeniosas, reí al ver el dibujo, se trataba de la persecución de un policía a un ladrón, y en un momento el policía termina dentro de un tacho de basura.

La puerta es abierta, donde entra un chico de cabello negro, y ojos asiáticos cafés, tenía una camisa a cuadros celeste con blanco y pantalones de pijama. Ambos nos miramos en silencio, chasquee mi lengua.

—¿Tuvimos sexo?—Pregunte—Porque si es así, tendré una larga conversación con Rosie.

—Ya quisieras tener sexo conmigo.—dijo Klaus.

—O tu conmigo.

Klaus rueda los ojos.

—No soy gay—Dice y ríe, me uno a su risa.—Solo... Tardaste en salir, y cuando saliste intente llevarte a tu casa, pero cargabas un pedo enorme encima, aun así, papá comenzó a mandarme mensajes de que llegara ya a casa y... Tuve que traerte.

—Bien, mejor tu que alguna otra chica, no soy infiel y no quiero empezar.—Dije tocando mis bolsillos hasta que chasquee mi lengua—Deje mi celular cargándose.

—Si, lo supuse.

—¿Esto es tuyo? —Pregunte señalando los dibujos. Klaus pretende no saber de lo que hablo, pero tras un momento de duda asiente. 

—Es un pasatiempo.

—¿Enserió? Bueno, deberías dedicarte a esto, es decir, hiciste la composición perfecta de persecución.

—¿Ah si? —pregunta y asentí.—Hice más, hay uno de un baile...

Y así pase mi mañana. Me olvide de mi dolor de cabeza, y Klaus me mostraba más dibujos con su composición adecuada. Le di unas sugerencias, y cuando quise recordar, ambos estábamos recreando algo perfecto y digno de una película animada.