𝐒𝐋*𝐓 ; Draco Malfoy[Traduccion al Español]

N I N E

HEARTBREAK;

No terminé conociendo a Hermione.

Terminé regresando a mi dormitorio, abrazando mi manta, mientras lloraba hasta quedarme dormida. Otra vez. Perdí una tonelada de peso ya que no había comido durante varios días, y estos fuertes dolores de cabeza siempre estuvieron en mi cerebro.

Pero no me importaba.

Todo dolía demasiado.

Odiaba admitirlo, pero creo que desarrollé algún tipo de sentimiento por Draco. No fue nada más que horrible conmigo, pero en ese momento, cuando estaba en su cama, me miró como si yo fuera especial. Como si a él ... le importara.

Por supuesto que no le importas, Amara. Eres una Hufflepuff y él es un Slytherin. Está enamorado de tu hermana.

Recuerdo cuando teníamos 13 años y mi padre había organizado una reunión. Invitó a los Malfoy y a los Parkinson. Los cuatro nos sentamos dentro de la habitación de Fiona, la única razón por la que me dejó quedarme fue porque mi padre la obligó. Pero de todos modos, todo el tiempo, le pedía a Draco que se levantara y le trajera esto, o que se levantara y tomara eso. Y lo haría. Para ella. Porque él la amaba, pero ella no lo amaba a él.

La miró como si fuera su mundo. Pero por alguna razón, ella nunca se enamoró de él. Ella no era tan débil como yo. Ella no estaba desesperada por el amor. Ya lo tenía con Cedric, un amor que no me merecía.

Quizás merecía los duros comentarios que Malfoy me dio. Me merecía el dolor.

Toqué las costras de mis nudillos, tratando de sentir algo. No me importaba si era dolor, solo estaba cansado de estar adormecida. Estaba cansada de llorar. Estaba cansada de que mis compañeras de habitación me suplicaran que saliera de mi habitación y me dijeran que parecía un esqueleto. Solo estaba cansada. Mental y completamente agotada.

"Alohomora."

Mi puerta se abrió y entró Hermione. Me senté de mi cama mientras ella me lanzaba una mirada de asombro, poniendo sus manos en sus caderas. "¡Merlín Amara! Necesitas comer algo ahora". Habló preocupada, corriendo hacia mí.

Me volví a mi lado, ignorándola. "No tengo hambre." Murmuré.

"No te creo", me agarró del brazo y me levantó. Gemí mientras ella caminaba hacia mi tocador, sacando una sudadera con capucha. "Ponte esto y ven abajo conmigo. Vamos a cenar." Ella me informó, y entrecerré los ojos a la morena. Su mandíbula se apretó.

"Ahora."

Ni siquiera tenía la energía para pelear con ella. Me puse la sudadera con la pequeña cantidad de energía que me quedaba y luego me levanté de la cama. Casi me caigo, no acostumbrada a estar de pie. Me sentí mareada cuando Hermione se acercó a mí, uniendo mi brazo con el suyo. "Bueno. Ahora ven." Me dijo en voz baja, ayudándome a ir al comedor.

Los estudiantes se quedaron boquiabiertos ante mi apariencia, pero no me importó. Mantuve la cara seria mientras caminábamos hacia el gran salón, los estudiantes sentados en las mesas de sus casas. Hermione me llevó a la mesa de Gryffindor y me preparó un plato de puré de papas y jamón.

"Come." Ella me dice, y asentí lentamente mientras picaba mi comida.

"Dios mío", jadea Ron, acercándose a la mesa. Los ojos de Harry se agrandan al ver mi pequeña figura. "¿Cuándo fue la última vez que comiste ...?"

"Cállate, Ron." Hermione ladró, enviándole una mirada furiosa. Él entrecerró los ojos hacia ella, pero permaneció en silencio mientras él y Harry tomaban sus asientos.