Plums (3/?)

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El día número treinta, los dos estaban regresando de recorrer las calles

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El día número treinta, los dos estaban regresando de recorrer las calles. Ariadne le contaba acerca de las propiedades curativas que la ciruela tenía en la memoria.

—¿Y eso cómo es posible? —le pregunto intrigado.

—Tienen sustancias antiinflamatorias que evitan el deterioro neuronal —respondió Ariadne—.También previenen el envejecimiento prematuro. Por su riqueza en vitamina C y antioxidantes (luteína, criptoxantina, zeaxantina y ácidos neoclorogénico y clorogénico), ayudan a reducir la oxidación celular implicada en el envejecimiento. Pero.. habló mucho, ¿verdad?

Bucky se encogió de hombros con una sonrisa apenas visible. —Me gusta escucharte.

Ariadne jugo con su cabello de modo que tapaba sus mejillas sonrojadas.

No era la primera vez que sus hormonas alborotadas (las de una chica de 16) le jugaban en contra estando al lado del ojiazul.

—Aunque el chocolate negro también mejora la memoria, incrementa el flujo sanguíneo al cerebro. Eso sí, es solo chocolate negro, no el de leche, ni el blanco.

Continuaron caminando, la rubia hablaba de más cosas y el castaño la escuchaba con gusto.

—¿Recuerdas lo que pasó en Coney Island? —pregunta la menor deteniendo su andar frente a un puesto de frutas.

Barnes escoge unas ciruelas, llena una bolsa y la paga mientras habla con el vendedor en rumano.

«Que voz tan.. ¡Malditas hormonas!», habla mentalmente.

—Convencí a Steve de montar el ciclón —responde Bucky, riendo bajo—. Termino vomitando.

Llegaron al cruce de la calle donde ambos se detienen una vez más, por el rabillo del ojo, ambos se percataron que el vendedor de periódicos (que está al otro lado de la calle) miraba con nerviosismo al mayor para después de un rato salir corriendo.

—No vayas —lo detiene cuando ve que intenta cruzar la calle—. Solo déjame buscarlo en el teléfono.

Ariadne leé en voz lo suficiente alta para los dos pero baja para el resto.

El soldado del invierno vuelve a atacar

La tarde del día de ayer el soldado del invierno hizo explotar una bomba fuera del edificio donde se llevaba a acabó la conferencia de las naciones unidas en Vienna.

El echo dejo muchos heridos y muertos, entre ellos al rey de Wakanda, T'Chaka...

Un silencio incómodo se estableció entre ellos. Ella sabía que él no lo hizo. Han pasado un mes juntos y el Soldado del Invierno solo a aparecido una vez, y James sería incapaz de hacer algo como eso.

Legado |#01 Saga Legado|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora