CAPÍTULO 20

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El sótano para nada era lo que recordaba, seguía igual de tétrico y El olor a humedad es muy fuerte.

-Vamos amor, te encargarás de la parte lateral izquierda así que las cosas que ya no creas útiles déjalas en la entrada, yo las subiré hasta el depósito de basura.- dijo y se metió, su cuerpo desapareció entre las miles de cosas.
Desde aquí puedo ver las fotos que están en las paredes, ya están opacas y se ven muy polvorientas.

No quería entrar ahí, es muy incómodo y sofocante.

Los recuerdos llueven como una tormenta en mi memoria.

Solté un suspiro, di un paso y la puerta se cerró de repente, haciéndose espantar un poco.

Mi mirada se quedó fija en aquella puerta, pues este tipo de cosas habían dejado de pasar; algunas cosas cayéndose, algunas otras cambian de lugar, las voces, las sombras, el que las puertas se cierren así...esto ya no había sucedido, solo cuando estaba él...

Se me hacía raro que todo estuviera tranquilo estos días, sin ninguna novedad.
Oh...pero en los días en que si...
Otro suspiro salió de mi alma ;sabia que era con lo que tenía que lidiar, sin embargo, no por ello el miedo se iba en estas situaciones.

Mi cuerpo pesado y rígido como una piedra, mis bellos de punta y los escalofríos que suben de mis pies a mi cabeza constantemente.
Todas estas sensaciones son tan familiar. Son señales que me hacen saber que no estoy sola.

Las odio, enserio, odio todo lo que tenga que ver con él.

El fastidio y odio se convirtió en algo cotidiano en mi. Es un malestar constante.

Deje a un lado el misterio y decidí abrir la puerta, está cedió y fui a mi destino.
Apenas podía caminar, habían cosas por doquier.




Aarón se veía entretenido en lo que hacía pues parecía apresurado.
El silencio entre nosotros siempre es incómodo y está vez no es la excepción, aveces, bueno, siempre es él el que intenta entablar una conversación pero jamás resulta bien, mayormente terminamos peleando.

Cada día se vuelve más difícil esta situación.

Él cada día se vuelve más loco.

Y aunque siempre busca algo de que hablar, es notorio que desde hace unos días ha estado muy callado.
Al menos eso me hace sentir relajada, su insistencia siempre me provoca vómito.
Agradezco que en estos momentos todo este en silencio, no quiero, no tengo energías para tratar con él; he aprendido a soportarlo pero así como su paciencia se agota pasará lo mismo con la mía.
Me he imaginado cientos de veces el como regreso a casa, me esfuerzo por sentir los brazos de mamá y papá pero ya no puedo...aveces me cuesta tanto recordarlos, he perdido la noción del tiempo, parece que el tiempo esta en pausa, siempre...siempre, todo es igual todos los días; sin embargo cada día rezo por mi vida a lado de este imbecil, el que se desquite conmigo también se hizo una costumbre así que agregaba una marca a la colección de su hermoso lienzo, como dice él.

Su puto y hermoso lienzo.

Me siento como su maldita esclava, cada segundo su nombre se repite en mi mente, es una voz constante que me hace desvanecerme en los recuerdos haciendo que extrañé de éstos pero eso jamás sucederá porque él lo dijo en un principio.
-Cuando era más jóven tuve amistades que hacían cosas ...no tan buenas, practicaban brujería y no puedo negarte que me intrigó mucho ese tema así que con el tiempo empecé a hacer trabajos- suspiro- E hice un lazo contigo. - mis ojos se abrieron en par, esto definitivamente es muy desagradable.
Antes de que hablara me puso su dedo índice en mis labios.

PRESA DE SU OBSESIÓN Where stories live. Discover now