CAPÍTULO 21

5.5K 256 82
                                    

Todo acaba de cambiar en un segundo.
Y lamentablemente no para bien.

Mi vida a cambiado por completo, definitivamente ya no hay algo que pueda animarme, todo dentro de mí se a quebrado, la alegría o la emoción por vivir un nuevo día se han ido.
La Daniela que solía ser se murió por completo y todo gracias a él.

Él arruinó mi vida, se llevó todo lo bueno que tenía o que pude llegar a tener.

Él es un completo monstruo...
Es un maldito maniático, inhumano al que solo le gusta y goza verme sufrir...aunque jura que me ama

Y con ello lamentablemente ya no podré escapar; a menos que alguien venga a rescatarme pero eso lo dudo mucho.

Dos malditos años llevo aquí y me aterra el hecho de que no sé por cuánto tiempo más estaré en este horrible lugar.
Ya no recuerdo mi voz o mi sonrisa, me es difícil recordar el rostro de mis padres, el calor del sol, la arena entre mis dedos cuando íbamos a la playa e inclusive ya no recuerdo la última vez que estuve feliz.

En estos dos años han pasado cosas realmente difícil y atroces, su locura jamás tendrá límite y me lo acaba de demostrar.
He tenido dos abortos debido a la fuerza de sus golpes.
Hace dos semanas tuvimos una gran y absurda discusión en la cual se puso maniático solo por qué no le respondí un te amo, fue tan brusco que me desmaye y al siguiente día que desperté mi cuerpo se sentía tan extraño que no podía ni siquiera moverme, no sentía nada de mi cuerpo, estaba tan perdida que ni siquiera sentía el dolor de la operación...no sabía que el muy maldito fuera capaz de esto y lo peor es que tenía miedo del como mierda lo hizo.

Porque si...me hizo una cirugía la cual dependía de mi libertad.

Fui una tonta al decirle lo mucho que lo detesto y que en cualquier momento, cuando tuviera la oportunidad me iría, fui una estúpida pues ahora dependo completamente de él...no puedo ir al baño sin su maldita ayuda, no puedo ni quiera vestirme por mi sola y todo por su maldita culpa.

Porque si...el decidió quitarme mi movilidad...mis esperanzas.
Mis piernas se habían ido dejándome así en una cama postrada y de vez en cuando en una maldita silla de ruedas, me quedaba horas viendo el vendaje en mis rodillas, imaginándome que nada de esto era real...pero eso nunca va a pasar, esto no es un estúpido sueño que al despertar me sentiré tan aliviada porque eso fue, un sueño, nunca desee esto y jamás fui mala con nadie por lo que me pregunta a diario como es posible que esto pudo pasarme, me preguntaba que era lo que podía estar pagando y nada...nada venía a mi mente y eso era aún peor. Deje de rogarle a Dios, al universo a quien sea que me estuviera escuchando, deje de pedir ayuda pues temía que incluso hiciera algo peor, podía quitarme mis cuerdas bucales o inclusive la lengua, podía sacarme los ojos u otra cosa peor...en este punto nada ya sorprende de él.

Y al contrario del como me sentía yo... él se ve renovado, se siente su alegría al tener mi dependencia, puedo sentir como se siente grande, como tiene el puto dominio sobre mi...es espantoso.

Ya no ponía resistencia a nada, en serio, absolutamente a nada y eso me mata por dentro.

-Hey amor, regresa- sentí como su mano pasaba de un lado a otro frente a mi rostro, parpadee  un par de veces y como dije antes...cuando caía en cuenta de lo que vivo y de mi estado solo me daban ganas de llorar y golpearlo hasta el cansancio, pero el golpearlo ya no estaba en mis planes pues la última vez que lo hice al día siguiente amanecí así.

Solo baje mi mirada y un gran suspiro salió de mi alma.

-¿En qué tanto piensas?

En lo feliz que sería si te mueres

PRESA DE SU OBSESIÓN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora