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La mañana llego y salió, para su sorpresa la hyuga ya lo esperaba en la puerta, la miro de reojo, la chica se veía mal, pero no era su problema, ya mucho había hecho quedándose en ese horrible lugar un día por ella.

Hinata intentaba seguirle el paso, pero el clima se lo impedía, los fuertes vientos con arena la hacían enterrarse un y otra vez, además del dolor en su vientre, no era tan doloroso como los dos días anteriores, pero aun si era molesto y limitante, agradecía que su cuerpo solo pasara por eso tres días, y ya se fuera hasta la nueva visita dentro de un mes.

Sasuke estaba fastidiado, el clima no ayudaba, debieron partir el día de ayer y la Hyuga no estaba siguiendo su ritmo ya varias veces la tuvo que jalar del brazo porque se quedaba atrapada en la arena. —TKS— decía con fastidio cada vez que la veía, Hinata por su parte solo bajaba la cara y murmuraba unos suaves gracias y perdón, cada vez que el la jalaba con fuerza, ella estaba siendo una carga pensó para sí misma.

Era de noche y la tormenta de arena por raro que fuera, no daba indicio de parar, sasuke harto de la situación decidió detenerse.

—acamparemos acá. —

—Que? —con ojos de preocupación respondió sorprendida su compañera.

—prefieres seguir caminado, por mí no hay problema, pero ya no te sacare de la arena— grito con furia, la poca paciencia que le quedaba se había agotado.

Hinata con cara de susto empezó a armar la carpa, ajustándola fuertemente a un arbusto que había al lado, jamás la había gritado y no quería pensar que pasaría si ella dejaba que la carpa se volara por los fuertes vientos, luego pensó que él también debía estar cansado, porque veía en sus ojos ojeras.

Ya adentro de la carpa ella se sentó en una esquina y el en otra, hinata saco comida de su bolso, junto sus dos manos y las estiro hacia sasuke con un suave rubor en sus mejillas, él pensó en no recibirla, pero la chica la sostuvo bastante tiempo frente a él, así que la tomo con un gesto aburrido y empezó a comer, era la primera vez que compartían algo así, aunque ya antes habían tenido misiones juntos, sasuke siempre llevaba algo de comer o compraba en el camino y hinata jamás se había atrevido a convidarle algo de su comida.

Hinata podía sentir la pesada mirada de sasuke sobre ella, el masticaba lentamente y la observaba como estudiándola, eso la hacía sentir algo cohibida al comer, así que se metió su onigiris a la boca de dos mordiscos casi atragantándose en el acto, escuchando de parte de sasuke un —TKS. — sabiendo que idioma sasuke, era estoy molesto, se dio la vuelta tomo su cobija y se acostó lejos de el para no incomodarlo más.

Hinata sabría que mañana ya no tendría su regla, así que podía seguirle el ritmo y dentro de poco estar en la aldea.

A medida que la noche avanzo la temperatura también lo hizo y empezó a hacer un frio, hinata temblaba inconscientemente y un dolor fuerte volvió a aparecer en su abdomen, —ahhhh— sasuke escucho un sonido de dolor, abrió los ojos y vio a la Hyuga en posición fetal con las manos en su estómago, también se dio cuenta que temblaba por el frio, para sasuke el frio no era nada, él estaba muy acostumbrado a dormir donde fuera, su cuerpo era años luz más fuerte que el de su frágil compañera, el de verdad deseaba dormir esta noche, las otras anteriores no había podido hacerlo y estaba más irritable de lo normal y ahora ella quejándose, ushh esta era de por si la peor misión, la del inuzuka no había sido tan fatal.

—Hyuga, salte de la carpa, no quiero escuchar tus lamentos—

La chica no respondió y siguió quejándose dolorosamente, sasuke se molestó, — vete, necesito descansar—

No obtuvo ninguna respuesta por parte de ella, sasuke se levantó enojado con la plena intensión de pegarle una patada, pero ella estaba profundamente dormida, no entendía cómo podía sentir dolor y dormir, pero luego se vio a el mismo, bajo los dominios de sus pesadillas, esas que aun a la fecha no había podido dominar completamente y las cuales lo poseían a su antojo, recordándole lo débil y humano que era.

—tsk— dijo con resignación, entonces recordó que cuando Karin estaba así mal por esas situaciones femeninas, suigetsu dormía abrazado a ella, era los únicos momentos en los que le permitía acercársele de esa forma, se dio cuenta que tenía dos opciones, darle calor a la Hyuga o salir el de la carpa, pensó en la segunda, pero no quería amanecer cubierto de arena, así que se acercó a Hinata pego su cuerpo al de ella y bajo su mano encima de la de ella, en el punto donde presionaba.

—HN— entonces era hyuga la que olía así, siempre que salía de misión con ella, había un olor a lilas cerca, sasuke pensaba que eran algunas flores en especial, pero ahora se daba cuenta que era Hyuga, sasuke sintió que ella dejo de temblar y su quejido disminuyo, el inconscientemente restregó su nariz en el nacimiento del cuello de hinata, sintió un thump, dentro de él y cerró los ojos cayendo dormido.

Hinata se despertó mejor, ya no sentía ni frio ni dolor, es más podría jurar que se sentía gratamente caliente, abrió los ojos perezosamente e intento moverse, y entonces fue cuando se dio cuenta que sasuke estaba totalmente pegado a su espalda y tenia su mano entrelazada en el estómago, se mordió el labio para no gritar, recordó que era un ninja debía ser tranquila ante cualquier situación, y con kiba, y shino a veces dormían juntos para evitar el frio, pero con ellos había un espacio de respeto y esto era totalmente diferente, sasuke había atrapado una pierna de ella dentro de las de él, pegando su cuerpo muy estrechamente con el de ella.

—Kyaa— dijo ella suavemente moviéndose con el mayor sigilo posible para no despertarlo, tardo mucho pero cuando por fin estuvo libre de su opresor físico se cuestionó como sasuke podía seguir tan profundo, aprovecho y salió de la carpa para dejarlo descansar más, aún era temprano y cerca diviso un oasis, aprovecharía para bañarse mientras sasuke se despertaba, por fin se había ido su menstruación, se refrescaría con el agua se vestiría y ahora si podría seguir con toda seguridad el paso a su compañero.

Cuando sintió que ella se alejaba se permitió abrir los ojos, él se había despertado solo unos segundos antes que la Hyuga y no podía comprender como él se había permitido eso, lo único que recordaba era, acercársele para dar algo de calor poniendo su mano sobre la de ella, no entrelazándola como estaban, tampoco supo en que momento su cuerpo se movió solo y atrapo la pierna de la Hyuga con ellas, era totalmente ilógico esas reacciones en él, lo único bueno era que había podido descansar como hace tiempo no recordaba, él se estuvo quieto esperando la reacción de ella, le dio algo de risa el hecho que ella hiciera un suave ruido de susto, por favor todas las mujeres querían con él, sasuke solo esperaba ver si la Hyuga aprovechaba la situación, pero como paso en Suna con el Kazekage, ella solo había luchado por salir de entre sus piernas y su brazo y correr hacia afuera como un conejito asustado, cosa que dio cierta satisfacción a su malicia.

Se levantó, se limpió la ropa, comió un onigiri de los que le había dado hyuga en la noche, le había gustado el sabor, de hecho, eran estaban deliciosos, por eso prefirió guardar uno para el otro día, cuando termino, se dispuso a buscar a la chica, la encontró desnuda sumergida en el agua, y la pudo detallar, parecía tener una piel suave y cuidada digna de una princesita del clan de ella pensó, su cuerpo ya era el de una mujer y sus atributos, interesantemente eran mucho mejores que los de las mujeres que iban a su casa, ahora entendía que veían los otros hombres en ella, la chica no era fea.

Historias SasuhinaWhere stories live. Discover now