Capítulo 3 "Crochet"

364 31 3
                                    

Me dejó muda.

Ruggero se empezó a desabrochar su camisa haciéndome querer mirar para otro lado pero claramente lo estaba mirando pero disimulando.

-Dejate de bromas y dime que clase de lugar es este.- Me senté en unas bancas que estaban ahí mirándolo de frente

-Peleas clandestinas.

Claro, ¿Cómo no lo imaginé?

-¿Tienes una pelea ahora?n-Pregunte y el asintio y desabrocho sus pantalones. -¿Puedo ver? - El me miró- La pelea- Explique y mis mejillas se acaloraron.

-¿No saldrás corriendo del miedo? -Mi valentia volvió al segundo

-Ruggero, no todas las mujeres les tenemos miedo a las peleas clandestinas. Ni al boxeo.- Me cruce de brazos y de piernas

-¿A que se debe que no tengas miedo?- Abrio un casillero que estaba detras mío a un costado y se puso unos shorts cortos. Mire mis uñas y hablé.

-Me crié con mi padre viendo peleas por la tele, seguro no es lo mismo pero no es como que me de impresión.- El sonrió arrogante como siempre.

-Entonces puedes ver- Me levante de mi banca y ambos comenzamos a caminar fuera de el lugar ese y salimos al montón de gente.

A un costado divise la barra donde daban tragos que estaba iluminada de luces led color azul y en el medio más al fondo pude ver el ring de boxeo.

Jamás presencié una pelea en vivo y siempre me había gustado la idea. No es que ame la violencia pero no me desagradaba el boxeo.

Cuándo estabamos por comenzar a caminar hacía el ring Ruggero paro y se colocó detrás de mi.

-¿Que haces?-Dije molesta

-A menos que quieras salir toqueteada por todos estos imbéciles puedo soltarte- Mordi mi labio y comence a caminar seguida de el por detrás y con su mano en mi cintura. 

-¡Ruggero!- Se escuchaba. Todos lo llamaban y aclamaban, una vez que llegamos al costado del ring un señor de unos 30 años se nos acercó. Se veía más decente que los demás.

-Bien, es importante que ganes- Le dijo a Ruggero ignorandome por completo.

-Lo haré. Necesito que te quedes con ella- Le dijo y ahí su mirada se fijo en mi.

-Si no sale corriendo cuándo termine el primer round te doy 100 dolares- Ruggero rió y el señor sonrió igual de arrogante.

-Te apuesto 200 a que no me iré hasta que la pelea termine-Me cruce de brazos desafiante y ambos hombres se callaron y me miraron

-Echo- El señor estiro su mano-, me llamo Luis, un placer.- Sonreí falsamente y tome su mano sin decir nada.

-¿Cuidate si?- Habló Ruggero y sin dejar que pueda suspirar o contestarle se fue.

-No debiste apostar- Nego a mi lado Louis cruzandose de brazos.

-¿Porque?

-Es una bestia.

¿Quién era una bestia? ¿Ruggero? ¿O con el que pelearia?

-Señoras y señores, la pelea ya esta por empezar- Una voz habló haciendo retumbar el lugar y la gente grito emocionada- por un lado... el demente, la bestia, el gran ¡Ruggero!- Reprimi una sonrisa, no era por Ruggero, era por la emoción que corría por mi venas.- Por el otro lado, el invicto, mejor conocido como el diablo... ¡Josh!- Todos gritaron igual o peor que lo hicieron con Ruggero.

Aplaudi emocionada, esperaba que Ruggero le de una buena paliza porque no quiero volver en el auto escuchandolo quejarse.

Escuche la risa de Luis a mi lado seguro al ver mi emocion.

Nuestro Tacto |Adaptación|Место, где живут истории. Откройте их для себя