Capítulo 7

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Tan pronto llegó Helen a casa fue a la habitación de su hija para revisarla.
Mientras ella revisaba a Susan, el salón volvía a sumergirse en un incómodo silencio. Peter se encontraba sentado en un extremo de la habitación y Caspian en el extremo contrario. Nadie hablaba, cada uno estaba sumido en sus pensamientos, solo se oía el lejano murmullo de los autos sobre la calle, hasta que la voz de Helen los regresó a la realidad.

-Tu hermana está bien, ayudó mucho el paño húmedo que le pusiste, solo necesita descansar- le sonrió de manera maternal a su hijo -¡Oh! Veo que ya se conocieron

-Si, así es- Peter fingió una sonrisa al igual que Caspian.

-Vine a darle las gracias por la cena de anoche y por su generosa hospitalidad- Caspian sonrió haciendo que Helen se sonrojara levemente.

-No hay nada que agradecer, ¿ya comiste algo?¿te diste una ducha?- Helen sonó muy maternal con él haciendo que Caspian recordara de nuevo a su madre.

-Si, muchas gracias, su hijo fue muy amable- sonrió de manera forzada.

-Algo me dice que se llevarán muy bien, son casi de la misma edad, ¿por qué no lo llevas a conocer la ciudad? Apuesto a que lo pasarían bien- Helen sonaba muy entusiasmada, ignoraba el hecho de que su hijo era, por mucho, mayor que su invitado.

-Suena...muy bien mamá- Peter sonrió al ver a su madre.

-Me gustaría quedarme, pero debo volver al trabajo. Pete, haz que nuestro invitado se sienta como en casa, nos vemos más tarde- se despidió de su hijo con un beso en la mejilla y salió de nuevo hacia el hospital.

-Tu madre es una gran persona, ya veo de donde lo sacaron- Caspian sonrió al recordar los escritos que hablaban sobre los hermanos y el gran corazón que tenían con todas las personas del pueblo.

-Si, ha sido gracias a los dos- Peter soltó un suspiro y después de eso nadie volvió a decir una palabra. Los minutos se hacían eternos en medio del silencio en el que la casa se encontraba, Peter contaba los minutos para que sus hermanos volvieran de la escuela y lo sacaran de tan incómodo momento. Sus súplicas fueron escuchadas y unos minutos después Lucy y Edmund aparecieron por la puerta.

-¡Caspian!- Lucy sonrió y corrió a darle un fuerte abrazo a su amigo -Me alegra que estés aquí.

-A mi también me alegra verlos Lu- sonrió por el abrazo -Hola Edmund- se acercó a él dándole un abrazo.

-Supongo que ya viste a mi hermana- Edmund sonrió de manera traviesa viendo a Caspian, a lo que este solo pudo negar con la cabeza.

-No en realidad, tuvimos un...pequeño encuentro- le dio una mirada rápida a Peter, quien lo veía fijamente.

-¿Qué pasó?¿Dónde está Susan?- Lucy miraba preocupada a Peter.

-Está en su habitación, tuvo algo de fiebre, pero ya está bien- sonrió mirando a su hermana -Hablé con mamá y vino a revisarla, ella se fue hace poco.

-Iré a verla, no tardo- Lucy subió a ver a su hermana dejando a los chicos en el salón.

-¿Cómo has estado? Te ves igual que la última vez que nos vimos, no me digas que no ha pasado el tiempo- Edmund empezó a bombardear con preguntas al rey quien intentaba hablar pero Edmund no lo dejaba.

-¡Edmund!, deja que hable- Lucy había bajado tan rápido como había subido a ver a su hermana -Si quieres que Caspian conteste debes cerrar la boca- sonrió y tomo asiento junto a Peter.

-Claro que ha pasado el tiempo, 20 años para ser más exactos- los hermanos lo observaron sorprendidos ante su respuesta, ninguno lo podía creer.

-20...¿20 años?¿Pero como es eso posible? Luces igual que la última vez que nos vimos- Lucy lo miraba impresionada intentando hacer algunas cuentas para saber la edad de Caspian.

-Ni yo mismo lo sé- lanzó un suspiro pesado pasando la mano por su cabello.

-¿Qué ha pasado en esos 20 años?- fue la primera pregunta que hacía Peter después de haberse mantenido en silencio durante un rato.

-Muchas cosas, sin duda, hemos tenido alianzas con otras naciones, algunas pequeñas batallas para defender el territorio, viajes, pero estoy seguro de que esta noticia les gustara- sonrió ampliamente mientras recordaba lo que había hecho en Narnia- Pero creo que será mejor decirlo cuando estemos todos.

-¿Cómo llegaste aquí?- una voz proveniente de las escaleras hizo que todos giraran a verla.

Ahí estaba ella, tan bella como siempre, sin importar que estuviera usando una ropa bastante extraña y que estuviera descalza. La tenía de nuevo frente a él como ambos habían soñado tantas veces pero que habrían negado si alguien hubiera preguntado.

-Deberías estar en cama- Edmund la tomó gentilmente de la mano y la guió hasta un sofá para que tomara asiento.

-Creí...creí que eras solo una alucinación- lo miraba muy atenta y con cierta curiosidad.

-Creeme que no soy un delirio- Caspian sonrió de oreja a oreja, como un bobo. Intentaba controlarse para no correr hacia ella y tomarla en brazos.

-Ya veo...- Susan, por su parte, intentaba no mostrar demasiada emoción por si en algún momento tenía que despertar, pero en el fondo estaba brincando de felicidad.

Edmund y Lucy los observaban divertidos al verlos tan perdidos el uno en el otro, a Peter no le gustaba admitirlo, pero también estaba feliz por su hermana, aunque tenía que interpretar al hermano celoso.

-¿Ahora nos podrás contar eso que nos gustará?- Edmund los sacó de su tan esperado reencuentro con una sonrisa divertida en el rostro.

-Claro- Caspian sonrió y los miró a todos, quería ver el rostro de todos cuando lo dijera- Reconstruí Cair Paravel

Las Crónicas de Narnia: Un nuevo mundoWhere stories live. Discover now