Capítulo 27

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Después de dos largos días, Susan fue dada de alta y pudo volver a casa donde toda su familia la esperaba con ansias.

Sus hermanos y padres intentaban ayudarla a recuperar la memoria, sin forzarla ni nada parecido, solamente le contaban lo que había pasado durante todo un año esperando que pudiera recordar algo.

Una de tantas historias fue la de cómo había ayudado a Liliandil con la labor de parto, pero cuando peguntó por la estrella y cómo la habían conocido salió a relucir el tema de Narnia.

-Vamos Lu, cómo puede ser posible que sea una estrella- la ojiazul se limitaba a reír ante la historia -Solamente son cuentos- sus hermanos no prestaron demasiada atención a los comentarios de su hermana hasta que esta preguntó por Caspian.

-Lo conocimos en Narnia, deberías recordarlo, cuando peleamos contra su tío y recuperamos el trono- Edmund la miraba con curiosidad -No me digas que también lo olvidaste- su hermano tenía un deje de burla en su voz que se esfumó con las palabras de Susan.

-¿Por qué siguen hablando de eso?- ante la mirada desconcertada de sus hermanos siguió hablando -De...Narnia, admito que fue un gran juego mientras estuvimos en la casa del profesor, pero...hablan de ello como si fuera real, no creerán que voy a tragarme la historia de que nuestra cuñada fue una estrella o de que el chico que se supone es mi novio era un príncipe, cierto?-

Para cuando Susan había terminado de hablar los ojos de sus hermanos estaban examinándola con curiosidad. Edmund fue el primero en dejar escapar una risa, que en lugar de ser de diversión sonaba más como una risa nerviosa. 

-Esa fue una buena broma, Su- Edmund seguía riendo hasta que vio a sus hermanos.

-¿Por qué dices eso? Susan, no fue un juego, todo fue real- los ojos de Lucy amenazaban con derramar un par de lágrimas, esperaba que todo fuera una mala broma de parte de su hermana, pero no fue así.

-No sé qué fue lo pasó durante este último año, pero te aseguro que mi supuesto novio no es un príncipe y mi cuñada no es una estrella, vamos Peter, diles algo- 

Los ojos de todos se clavaron en Peter que se había mantenido en silencio. Se limitó a ver a Lucy, quién tenía los ojos llenos de lágrimas y para evitar una discusión prefirió dejar que Susan descansara, llevándose fuera de la habitación a sus demás hermanos.

Una vez fuera Lucy limpió sus lágrimas mientras los tres trataron de asimilar lo que había pasado.

-¿No creerán que ella...- Edmund no se atrevía a terminar su oración por miedo a la respuesta de sus hermanos.

-Lo olvidó

Por lo que restó del día ninguno se atrevió a tocar el tema de Narnia con Susan, supusieron que la chica estaba muy cansada y abrumada con toda la información que sus hermanos le estaban dando, aunque una voz dentro de ellos insistía en que Susan había olvidado a Narnia por completo.

Al día siguiente los Pevensie fueron a la casa de Caspian para hablar sobre la situación en la Susan se encontraba.

-Ella asegura que todo ha sido solo un juego- Lucy había empezado a hablar en cuanto todos estuvieron reunidos en el salón, no se podía seguir guardando todas las emociones que tenía y que necesitaba compartir con alguien.

-Entonces ¿recuerda o no?- Rilian se encontraba un poco confundido, no entendía muy bien que era lo que pasaba por la cabeza de Susan.

-Recuerda, pero cree que todas sus memorias son parte de un juego o de un sueño- Edmund hablaba mientras se entretenía jugando con un botón en la manga de su chaqueta. 

Durante toda la semana el clima había sido bastante caluroso, pero esa tarde, por alguna extraña razón las nubes habían cubierto el cielo de Finchley provocando que el aire se tornara frío, haciendo que el humor de los hermanos bajara aún más de nivel.

-¿Me recuerda? Es decir, sabe que en algún momento coincidimos, no?- había una pizca de esperanza en la voz de Caspian que hizo sonreír levemente a Lucy.

-No lo sé, supongo que te recuerda, pero a su manera- Peter se encontraba distraído con su bebé, le preocupaba la situación con su hermana, pero prefería no sobre pensar demasiado las cosas y su hijo era la excusa perfecta.

-Pensamos que si todos hablamos con ella podríamos hacerle ver que no es ningún sueño de lo que ella habla- Lucy miraba a todos con una pizca de esperanza.

-No me malinterpreten, pero no creo que sea lo mejor- los hermanos miraron con curiosidad a Liliandil -Puede ser que se sienta abrumada si nos ve a todos intentando presionarla, lo mejor será darle tiempo para que recuerde por si misma. 

La visita a la casa de Caspian terminó demasiado rápido después de esa charla y una vez que los Pevensie se fueron, él salió de la casa con intención de despejar su mente. Caminó un par de minutos hasta llegar a una banca en un parque. Pasados unos minutos se sentó junto a él una silueta bastante familiar.

Durante un buen tiempo ninguno de los dos habló, solo se podía escuchar levemente sus respiraciones.

-¿Cuánto tiempo...llevamos saliendo?- Susan evitaba mirar a Caspian y mientras se entretenía jugando con una piedra entre sus zapatos.

-Un par de meses, pero qué más da, no lo recuerdas- el muchacho también evitaba mirarla, no le había dicho a nadie, pero en el fondo estaba enojado. Ni él mismo sabía con quién estaba enojado, si era ella la culpable o la persona que provocó el accidente, incluso llegó a culpar a Rilian por intentar conducir.

Susan se limitó a asentir suavemente con la cabeza y de nueva cuenta ambos se quedaron en silencio por unos minutos, pero algo daba vueltas en la cabeza del telmarino.

-¿Cómo fue qué llegaste aquí?- ante la pregunta, Susan lo miró por primera vez desde que había llegado al parque.

-No lo sé, solo salí de casa y algo me guio hasta aquí- la chica se encogió de hombros restándole importancia -Lo extraño es que...no recuerdo haber venido aquí antes.

-Lo hiciste- Caspian la miraba muy atento, no quería perderse de su reacción.

-¿Tú cómo lo sabes?

-Te traje aquí en nuestra primera cita

Susan no podía despegar los ojos de Caspian. Estaba asustada, había algo dentro de ella que aún tenía una conexión con el telmarino y le preocupaba no saber por qué.

-Creo que...es mejor que regrese a casa, no saben que salí y puedo preocupar a mis padres- la ojiazul se levantó muy deprisa y sin dejar que Caspian dijera una palabra, ya se encontraba caminando a casa.

Caspian regresó a casa con un leve rayo de esperanza dentro de él. Susan lo recordaba, algo dentro de su inconsciente lo recordaba, solo necesitaba de algo que desbloqueara la memoria de la chica.

Mientras tanto, cuando Susan regresó a su casa, corrió a su habitación tumbándose en la cama. No sabía que era lo que había pasado mientras estuvo en el parque, tenía miedo, pero al mismo tiempo estaba llena de curiosidad por lo que había pasado en esos meses. Era como si tuviera una cortina frente a sus ojos, sabía que había algo detrás de ella, pero no podía quitarla para ver con claridad.

Después de la cena, dónde a penas tocó la comida, regresó a su habitación. Estuvo leyendo durante un rato y mientras Lucy se alistaba para dormir, se escuchó un quejido de dolor.

-¿Qué pasa?- Lucy se asustó al verla tomándose la cabeza con ambas manos.

-Me duele mucho la cabeza- la menor de los Pevensie ayudó a Susan a sentarse en la cama.

-Iré por un poco de agua.

Cuando Lucy salió de la habitación, Susan cerró los ojos y tomó un par de respiraciones profundas intentando calmarse pero fue invadida por un montón de imágenes sin sentido.

Su cabeza daba vueltas mientras estas imágenes  seguían atacándola, pero hubo una en particular que llamó su atención. 

Era ella, estaba sentada en lo que parecía ser un mantel en medio de un gran parque, pero había alguien más, alguien que aún lograba reconocer.

Cuando Lucy volvió la encontró sentada abrazando su almohada.

-¿Estás bien?- la chica dejó el vaso con agua sobre la mesa de noche su hermana y tomó asiento junto a ella.

-Creo que recordé algo

Las Crónicas de Narnia: Un nuevo mundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora