Capítulo 17

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-¿Susan?....

-¿Dijiste algo?- Liliandil miró a Peter con curiosidad, escuchó que murmuró algo, pero no entendió lo que él había dicho.

-No, nada- Peter le dio una sonrisa a la estrella -Creí haber visto a alguien- echó un último vistazo hacia donde había visto a su hermana pero ella ya se había ido -¿Nos vamos?- la estrella sonrió y continuó caminando con él.

Cuando la tarde empezaba a caer Peter llevó a Liliandil hasta la puerta de su casa para después regresar a la suya con una sonrisa boba en el rostro.
Al llegar a casa vio a sus hermanos menores viendo una película en el salón.

-¿Están solos?

-Si- Lucy contestó sin despegar los ojos del televisor.

-¿Y...Susan?¿No está aquí?

-Aquí estoy- Susan entró de repente por la puerta principal despertando la curiosidad de su hermano mayor.

-¿Dónde estabas?- Peter miró por el rabillo del ojo afuera de la ventana esperando ver a cierto chico.

-Salí con unos amigos, Lucy no te lo dijo?- la muchacha intentó sonar lo más segura posible, sabía que a su hermano no le agradaría el que saliera con Caspian.

-No, no me lo dijo- Peter tenia una mirada seria hasta que su hermana empezó a hablar.

-¿Qué hay de ti? No te vi en toda la mañana, dónde estuviste?- ahora Susan lo miraba con curiosidad y al ver el pequeño sobresalto de su hermano empezó a sacar sus propias conclusiones.

-Estuve haciendo...cosas- Peter se encogió de hombros y sin decir más subió a su habitación.

Susan se quedó pensativa, unas ideas vagas empezaban a pasear por su mente, pero prefirió no darle importancia, se despidió de sus hermanos y subió a su habitación dispuesta a dormir.  Había tenido un hermoso día y no quería terminarlo discutiendo con su hermano por cosas sin sentido.

Al día siguiente, como era costumbre, Caspian se encontraba en el trabajo de Susan, la chica lo había citado para empezar la búsqueda de un trabajo para el moreno.

-¿A dónde iremos primero?- el muchacho estaba claramente nervioso, no sabía que planes tenía Susan pero no le desagradaba la idea de pasar todo el día junto a ella.

-¿Confías en mi?- claro que él confiaba en ella, así que solo atinó a asentir con la cabeza para después ser tomado de la mano por Susan y arrastrado fuera del lugar.

 Caminaron por un par de calles hasta que se detuvieron frente a una barbería. El muchacho estaba confundido y Susan pudo notarlo por lo que le dijo lo siguiente.

-Creo que necesitas un cambio, ya sabes, para adaptarte mejor a este lugar, además, creo que un corte de cabello despejará tu mente y tal vez puedas pensar en lo que te gustaría hacer- Susan al no obtener ninguna reacción por parte de Caspian siguió hablando intentando retractarse por haberlo llevado hasta allí sin saber si a Caspian le gustaría o no la idea  -Bueno...yo, era solo una idea, no tienes que hacerlo si no quieres, podemos empezar a buscar...

-Hagámoslo- las palabras de Caspian hicieron que la chica sonriera de oreja a oreja -Tiene mucho que no me hago un corte de cabello, creo que me vendría bien- ambos sonrieron y entraron a la barbería.  

Mientras esperaban que le cortaran el cabello a Caspian, otras dos personas tenían algo parecido a una segunda cita. Peter quería volver a ver a Liliandil así que buscó cualquier excusa para poder verla y al no encontrarla se armó de valor para invitarla a almorzar, a lo que ella no se negó.

Liliandil llegó temprano para ayudar con el almuerzo, pero no llegó sola, Rilian estaba con ella. El mayor de los Pevensie no contaba con el hijo de la estrella, por lo que tuvo que fingir que estaba contento de verlo, de lo que no estaba sorprendido era que Caspian no apareciera con ellos, así que le pareció buena idea preguntar por él a lo que Liliandil se limitó a decir "Creo que saldría a buscar empleo" teniendo esa respuesta Peter dejó las preguntas de lado para pasar un buen rato en compañía de la estrella.

Mientras cocinaban Peter salpicó por accidente a Liliandil, él intentó limpiarla pero ella lo sorprendió salpicándolo también comenzando una pequeña batalla en la cocina cuando fueron interrumpidos por dos personas.

-¿Interrumpimos algo?- la voz de Caspian resonó por la cocina  dejando sin palabras a Liliandil y a Peter.

-¿Qué estaban haciendo?- Susan miraba a Peter intentando no reír al ver a su hermano y la estrella cubiertos por lo que parecía harina y algunos huevos.

-Solo...cocinábamos- contestó la estrella para después reír junto con Peter, al regresar la mirada hacia Caspian y Susan pudo darse cuenta del cambio de su esposo -Tu cabello...

-Si, Susan me ayudó con esto- el muchacho sonrió al ver a Susan.

-Te ves muy bien, fue una buena idea- la estrella sonrió diciendo esto último a Susan -Amm...creo que necesitaré ir a limpiarme- tanto Peter como Caspian lanzaron una mirada a Susan para que auxiliara a la estrella.

-Te... puedo prestar algo, claro, si tu quieres- al verse un poco forzada, Susan no tuvo otra opción más que llevar a la estrella al baño y prestarle un poco de ropa. 

Una vez que Liliandil estuvo limpia, tanto ella como Susan bajaron a la cocina para ayudar a terminar el almuerzo. Si alguien hubiera llegado en aquel momento podría haber jurado que aquel cuadro era digno de una familia, se podía escuchar el sonido de los cubiertos chocar contra los platos, algunas risas y una plática amena donde, por un momento, no hubo discusiones ni celos, simplemente era un momento que todos estaban disfrutando. 

Después de que todos terminaron el almuerzo Caspian, Rilian y Liliandil se quedaron en casa de los Pevensie toda la tarde comiendo palomitas y viendo un maratón de películas que, según Edmund, son las mejores de toda la historia. 

Mientras veían una de las películas Susan se quedó dormida y por accidente su cabeza quedó sobre el hombro de Caspian, quien estaba sentado junto a ella. El chico sonrió levemente al ver a Susan y se movió un poco en el sofá con la intención de que la chica estuviera más cómoda. Un par de minutos después Susan abrió de a poco los ojos encontrándose con Caspian, estando en esa posición pudo ver la incipiente barba de un par de días del telmarino, pudo percibir el olor de la colonia que él usaba, sentía ese ligero calor que emanaba de su cuerpo, se sentía tan bien estar en ese lugar. Ella estaba tan concentrada en sus pensamientos que no fue consciente del momento en que Caspian la miró.

-Hola- Caspian sonrió al verla.

-Hola- la chica sonrió de manera boba. Ambos se miraban con ternura hasta que algo hizo "click" en la mente de Susan y de inmediato de alejó de Caspian rompiendo esa conexión. 

Mientras ambos retomaban la compostura ni ella ni Caspian se percataron de que alguien en el salón los había visto en aquel pequeño momento que habían compartido.

Las Crónicas de Narnia: Un nuevo mundoWhere stories live. Discover now