Shut Up, ᴄᴜʀʟʏ ♡

Suyo.

Su lengua, insistente, comenzó haciendo círculos lentos al rededor de la entrada del más alto, que se estremecía cerrando las piernas inconscientemente.

Harry se mordía el puño tratando de mantenerse callado frente a las mil sensaciones que estaba experimentado al tener a Louis entre sus piernas. Este, se las separaba cada vez que las cerraba, y tuvo que mantenerlas así , apretando sus muslos mientras se deleitaba chupando cada resquicio que podía de Harry.

La lengua del más bajo jugaba en el interior del rizado, y comenzó a penetrarlo con ella haciendo que soltara un gemido audible por toda la habitación ,y viendo como este decidió sentarse aún con el ojiazul en su entrada. Automáticamente Louis elevó uno de sus brazos que se había mantenido en el muslo de Harry y lo dirigió a su boca.

—Shh. ¿No querrás que suba Anne y me vea haciendo a su hijo estremecerse, no?—

—N-no. Perdón.—

—Me pone tanto escucharte. Dios Harry, no me pidas perdón por ello.—

La lengua volvió al lugar del que nunca debería haber salido y entraba y salía con facilidad. Harry notó una electricidad de repente y jadeó.

—Oh Dios, si-sigue justo ahí.—

—No puedo llegar bien con mi lengua, bonito.— Dirigió dos de sus dedos hacia la boca de Harry y este los lamió y chupó frenéticamente, como si ya fuera consciente de las intenciones del ojiazul.

Los ojos de Louis tornaron oscuros al ver a Harry succionando sus dedos.

—Mírame.— El de ojos esmeralda lo hizo sin dejar las falanges de Louis. — Eso es, tomándolos tan bien sin habértelo tenido que pedir. Tan buen chico para mi.—

Al sacarlos de su boca se escuchó el sonido y un hilo de saliva se escurría por los labios de Harry, que miraba perdido al ojiazul entre sus piernas.

—Voy a follarte con mis dedos. ¿Los quieres? —

Harry asintió, y se acercó más a la orilla de la cama, volviendo a separar bien las piernas y sintiendo como Louis lo miraba con ojos lujuriosos.

—S-solo hazlo de una vez.—

—Te ves precioso desde aquí. Tan desesperado.—

—L-Louis ... quiero sentirte.—

—Tus manos. Necesito que las pongas aquí y te abras para mi.—

Harry sin perder mucho tiempo llevó sus manos a sus glúteos y los separó, dejándole vía libre a Louis para poder penetrarlo a gusto con sus dedos.

— Tan abierto. Tan dispuesto para ser follado.—

Louis acercó sus labios una vez más y succionó levemente el borde del anillo muscular, dándole un leve mordisco y ensalivándolo para la intromisión.

Luego, uno de sus dedos comenzó a rozar la zona haciendo círculos y Harry tuvo que dejarse caer hacia atrás tapándose la boca con ambas manos.

Despacio y certero, ese mismo dedo empezó a abrirse paso por la entrada de Harry , que sentía que no podía callarse mucho tiempo más. Louis espero a que se acostumbrara cuando la mitad de su falange se había quedado dentro del rizado. Una vez pudo ver que sus paredes lo apretaban, lo metió de golpe.

—¡Ohh Louis, sí! —

— Estás muy apretado, me va a costar no hacerte daño, cielo.—