Shut Up, ᴄᴜʀʟʏ ♡

Loco.

Al separarse del beso, Harry lo miró sorprendido reprimiendo una sonrisa. Louis tenía la mejillas sonrojadas y por una vez se notaban sus nervios.

—Estás loco.— fue lo único que pudo decir el ojiverde.

—No hay quien te entienda, curly.—

—Gracias. No tenías porque haberlo hecho...—

—Estoy acojonado por esto, pero joder, se siente bien.—

Harry miró a ambos lados del pasillo y tras comprobar que no venía nadie, se acercó a devolverle el tímido beso, esta vez más rápido y más infantil que el anterior.

Estaba dispuesto a dirigirse a su clase, al igual que Louis, cuando de repente alrededor de diez personas salieron corriendo hacia ellos con móviles en mano y cuchicheando.

Rápidamente Harry se alejó de Louis por puro impulso, confuso con la situación. Los jóvenes que allí estaban eran compañeros de Louis y cada vez llegaba más gente.

El ojiverde pudo ver como también había empezado a llegar gente de su clase, y sentía que el corazón le iba a explotar. No sabía que estaba pasando, pero sentía que sus piernas y sus palabras estaban estancadas.

Louis, no estaba actuando muy diferente a él. Por primera vez pudo divisar al verdadero Louis Tomlinson, sin su fachada, indefenso, nervioso y sin saber que hacer.

Para aclarar todas sus dudas, apareció Danielle haciéndose paso entre la gente, riendo y mirando con asco a los dos chicos que se encontraban en el centro, pero especialmente al de rizos chocolate.

—¿Veis? Os lo dije. Son maricones.—

La gente cuchicheaba mirándolos con desprecio, señalándolos y riéndose en voz baja.

—Y por esta razón, queridos compañeros. Louis Tomlinson me ha rechazado. Porque le gustan las pollas.—

Louis apretó sus puños y tensó su mandíbula mirando a un punto fijo, solo tratando de controlarse, pero no decía nada. No miraba a Harry, quien en cambio, no dejaba de voltear su cara de vez en cuando para verlo a él .

Danielle se acercó a ellos y se colocó entre ambos, mirando de frente a todos sus compañeros. Louis tenía la mirada perdida y Harry la tenía en el suelo.

La joven se cruzó de brazos y tras soltar una risa sarcástica comenzó a buscar en su móvil una foto.

—Esta es la prueba.— Enseñó una foto reciente, muy reciente en realidad, del beso de ambos chicos.—Solo iba al baño, y me encuentro al nuevo besando a Louis. ¿Y sabéis que? Mi ex ni si quiera se apartó. Se dejó besar.—

—¿no es repugnante? Me apuesto lo que sea a que esta polla se está follando este culo, después de haberse tirado a toda mujer con dos piernas de esta universidad.— Dijo señalándolos respectivamente.

Danielle se acercó a Harry que cerró los ojos con fuerza y se abrazó a sí mismo al notar como jugaba con sus rizos sin dejar de reírse.

—Oh, pobre Harry... ¿piensas que eres especial? Solo eres su nuevo entretenimiento. El bicho raro que se propuso follar desde que llegaste. Y adivina que... Lo ha conseguido.—

—Danielle apártate de él.— Ejecutó Louis con ira sin dejar de mirar a ese punto fijo.

—¡abre los ojos, maricón!— gritó, y Harry sin darse cuenta obedeció. La chica comenzó a señalar a diferentes jóvenes que allí estaban haciendo que el ojiverde las mirara a todas.