XXV

302 40 12
                                    

Sabía lo que eso significaba y empezó a ponerse nervioso, las manos le temblaban y su pecho se aceleraba empezando a sentir molestia en el mismo a la par que su respiración empezaba a cortarse.

En cuanto llegó a donde tuvo tanto miedo de llegar el celular cayó de sus manos debido a la manera en que estas temblaban y las lágrimas empezaron a caer desenfrenadamente de sus ojos.

Joel contempló la escena sin saber correctamente que hacer, empezando a angustiarse también.

—Joel- murmuró empezando a llorar, con la voz quebrada, mientras se agarraba el pecho intentando no sentir tanto dolor. El mencionado buscó rápidamente en su mochila una botella de agua que le ofreció.

— ¿Por qué hiciste de pasto en primero?- preguntó con un nudo en la garganta debido a la angustia que inundaba su cuerpo, pero en ese momento quien importaba era Erick- Además, parecías más una nube verde que pasto.- Recordó ganándose una pequeña risa por parte del ojiverde.

—Falté el día que iban a dar los papeles importantes- explicó tratando de limpiar las lágrimas que inundaban su cara, en vano ya que estas no paraban de salir ante la molesta en el pecho y el miedo que lo rebalsaba- me daba vergüenza tener que hablar frente a todos así que me hice el enfermo ese día- recordó dando golpes a su pecho, que Joel frenó tomando sus muñecas ponerlas en sus piernas.

— ¿Te comes las uñas?- preguntó llevando su atención a sus manos.

—A veces, pero no me doy cuenta- se justificó.

—Yo solía hacerlo- mintió- cuando notaba que lo hacía respiraba así, mira, sígueme- indico inhalando lentamente, mirándolo ante la espera de que él lo haga y cuando fue así exhaló.

Repitieron la acción unas diez veces hasta que la respiración del azabache se normalizó segundos después de que el llanto se frenara empezando a sentirse más tranquilo y a su vez incómodo.

—A todo esto no me explicaste por qué ese pasto parecía una nube verde- cuestionó al notar la incomodidad del ojiverde.

—No lo sé, supongo que era más fácil de hacer- explicó- pero yo estaba feliz así.- sonrió levemente agachándose para tomar su celular pero Joel se le adelantó.

— ¿Estás de acuerdo en que la borremos?- preguntó, temeroso ante la reacción.

—Él me hizo mucho daño.- comentó en un susurro sorbiendo por la nariz.

—Entiendo.- comentó sin incitarlo a seguir mas con ganas de que lo haga.

—Me rompió- prosiguió sin dar muchas aclaraciones- literalmente; una vez me golpeó tanto que casi me mata, estuve un tiempo en el hospital- suspiró, mirando hacia el cielo.

— ¿Por qué te golpeaba? Si se puede saber, digo.

—No solo a mí, a mi mamá también; peleaban mucho, terminó poniéndole una orden de restricción- comentó, buscando fuerzas para seguir.

—Oh.- fue lo único que salió de la boca del rizado mientras lo abrazaba con más fuerza, por los hombros, la misma que usó Erick para seguir.

—No me gusta usar esa expresión ¿Sabes? Me hace sentirlo mucho más real, y yo sé que fue real; yo sé que cada noche cuando intentaba dormir aparecía un cuerpo sobre él mío, yo sé que cada vez que llegaba del colegio mi cuerpo era usado como juguete, yo sé que mi primer beso, si así puede llamarse, fue forzado, yo sé que a la vez me trataba como la persona más fea y asquerosa del mundo, yo sé que eso pasó, yo sé que abusaron de mí, conozco la realidad de eso pero detesto sentirlo así.- dijo, finalmente, soltando un fuerte suspiro dejando salir eso que por tantos años guardó.

—Debió ser horrible.- fue lo único que logró expresar Joel, totalmente impactado por lo que acaba de escuchar consiente de que nada de lo que hiciera podría sanar esa herida.

—Me siento tan mal, no por eso sino porque sé que pude haberlo detenido, sé que pude hablar y no lo hice y si siguió por tanto tiempo fue por mi culpa- dijo más para sí mismo, con la voz quebrada por primera vez desde que empezó- es mi culpa y nunca me lo perdonaré, nunca podré perdonarme permitir que me hicieran tanto mal, nunca podré remediarlo y lo único que quiero es morir.- Finalizó limpiando la única lagrima que logró salir de sus ojos antes de que un par de sus compañeros aparecieran en la esquina de la plaza junto al sonido del timbre de entrada.

Estoy realmente agradecida con todos/as ustedes por leerme, por compartir esto conmigo, por cada voto y comentario, tanto en esta como en otras fics su apoyo es un mimo al alma en su máxima expresión.

No se me asusten jajaja no es una despedida, solo en agradecimiento, estos dos todavía tienen mucho camino, dolores y alegrías juntos no solo en esta sino en otras fics publicadas que planeo retomar al finalizar con esta asi que espero que disfruten todo tanto como yo escribiéndolo. 

Luces apagadas||Joerick||Terminada||Where stories live. Discover now