Luego de que el ojiverde se fuese a su casa Joel fue directo a su computadora a buscar los síntomas que observo en Erick hace un rato.
No supo exactamente como buscarlo así que busco con palabras clave: Miedo, sudor, temblor, náuseas, sentimiento de ahogo, taquicardia.
Le gustaría decir que el resultado que la pantalla del ordenador le arrojo le sorprendió, pero la verdad que de alguna manera ya se lo esperaba.
En realidad, era algo obvio:
Ataque de pánico.
Erick había tenido un ataque de pánico.
Paso a continuar su búsqueda para descubrir las posibles causas, estuvo un par de minutos buscando hasta que encontró algo que le resultó bastante convincente.
Estas crisis varían según la persona pueden aparecer sin ningún motivo, mientras que otras veces son otras circunstancias las que provocan el ataque, como el propio miedo y la preocupación de una persona que ya ha pasado por uno y teme que vuelva a ocurrir: esos sentimientos pueden desencadenar un nuevo ataque.
Si bien podría ser la primera vez que le sucedía le parecía una posibilidad poco probable por lo que se planteó cuestionarle si era algo que le había sucedido anteriormente.
Todo lo que le afectase a Erick lo afectaba a él, y por eso quería estar lo más informado posible al respecto de lo que le sucedía.
Por lo que, al día siguiente luego de prepararse para el colegio, sin sacar al ojiverde de si cabeza, salió al mismo con una sonrisa esperando ver al mayor.
Al llegar este ya se encontraba sentado dónde siempre jugando con sus manos, aunque llegó a notar que sus ojos luchaban por no cerrarse decidió no comentarle nada al respecto, pues siempre tenía sueño, algunas veces hasta se lo decía.
Se le hacía algo muy extraño, pero probablemente no era nada serio por lo que decidió no prestarle mucha atención. Esperaba no estarse equivocando.
—¿Puedo? - pregunto cuando estuvo a su lado, el ojiverde asintió.
La misma rutina de todos los días, tal vez viceversa, pero al final era obvio que terminarían sentados juntos, era simplemente una costumbre.
—Tengo sueño- comento bajito el ojiverde frotando sus ojitos.
—Lo note- reí ligeramente- tus ojos se cierran- comento, aunque fuese una obviedad para el azabache- pareces siempre tener sueño.
—Siempre tengo sueño- afirmó dedicándole una leve sonrisa.
—¿Por qué?
—No lo sé, me cuesta mucho dormir por la noche, pero igual me levanto temprano, aunque no quiera- explicó haciendo puchero.
—¿Qué te dijo tú mamá? - cuestionó.
—No lo sabe, no creo que sea tan importante como para contárselo- se encogió de hombros.
"Al igual que mí falta de apetito, permanente cansancio, bajada de peso y déficit de concentración" añadió en su cabeza mas no lo dijo en voz alta.
—Supongo que tampoco le contaste lo que te sucedió ayer- afirmó en un tono de pregunta, Erick bajo la mirada y negó con la cabeza- pero ¿qué fue exactamente lo que te sucedió? - cuestionó fingiendo no saber- ¿te había pasado antes?
—No sé qué es- confesó y suspiro antes de seguir hablando mientras jugaba con sus dedos como si fuese lo más interesante para hacer- pero sí, me había pasado antes... ahora no tanto pero antes era demasiado... frecuente- contó en voz baja haciendo eventuales pausas.
—¿Cuando inició? ¿Fue de la nada o....? Si me quieres contar, obvio- cuestionó tratando de no presionarlo mucho para que se abriera.
Justo cuando el ojiverde abrió la boca dispuesto a contestarle el timbre sonó y la maestra entro indicando el comienzo de la clase y el final de la conversación, por al menos las próximas dos horas.
Joel no pensaba parar hasta saber que era lo que tanto atormentaba a Erick y ayudarlo a que logré superarlo.
Solo subo esto para q me feliciten xq hoy cumplo 15 añitos ahre
Durante el día intentaré actualizar las otras dos historias para q también me feliciten ahre una falta de amor, perdón.
