Lee el prólogo para conocer un poco la temática.
____________________________________________
Traducción hecha por mí y autorizada por la autora original, @Lalamylisa. Todos los créditos de la creación son para ella.
⚠️La obra toca varios temas deli...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
2:35 pm, Busan
"Oh, mierda." Vamos.
Cierro mis ojos con fuerza, rogando por que la cantidad de pensamientos sucios sean necesarios. Que la simple... bueno, la altamente sexualizada (pero aún muy respetada) imagen de Jennie me haga venirme.
¡Déjame venirme!
Tenso mi mandíbula por la frustración sexual y suelto un ronco gruñido.
El gruñido hace cosquillas en mi garganta de la misma forma en la que toco mi sexo. Me acaricio a mí misma.
No hay nada que quiera más que prender fuego entre mis piernas. Quemarme en una hoguera de placer. Con chispas y todo eso. Ya saben, como cuando... oh da igual, el punto es que estoy muy caliente y necesito una liberación.
Sólo piensa en Jennie.
Con su cabello revelde de lado, provocándome. La cabeza echada para atrás, lengua entre sus dientes y con ojos tan bellos como los de las diosas antiguas. Digo, eso podría ser verdad. Ciertamente es una mujer, pero tal vez también es algo más-
Los egipcios creían que los gatos eran los guardianes de la muerte - tengo la sensación de que Jennie podría tener esa clase de poder.
Es digna de esa clase de poder.
De ser superior a mí - Lisa, quien le serviría, se arrodillaría ante ella, la adoraría.
Una guardiana. Una reina. Una diosa.
Del tipo de persona que es seguida por millones.
Amada por muchos.
Pero complacida sólo por mí.
Me acordé de ayer, cuando estuvimos juntas. La vi, viéndome, mientras me tocaba sola.
Con los pechos expuestos y las piernas abiertas, para ser testigo de los resultados de haberla follado. Muslos brillantes, mojados por mis dedos. Mi delicado tacto... o no muy delicado.
Odio imaginarla siendo de otra persona. Pero cuando su centro escurre así por mí no puedo evitar ponerme un poquito arrogante.
"Fóllame, bebé." Grito, junto con mi imaginación.
"Fóllame." Gruño en voz baja, deseando con tantas ganas satisfacer mis necesidades.
