40. So, this is...

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La casa del árbol se mantenía casi intacta desde que Vegetta se la regaló.

Aunque tuvo que hacerle unas remodelaciones luego de que Willy estuviera de chistosito poniendo TNT sobre ella y causando varios destrozos, por suerte pudo repararla.

Casi no la utilizaba y no entendía porque, se había convertido en uno de sus lugares favoritos en cuanto la vió pero por alguna razón no pasaba mucho tiempo en ella.

Aún recordaba aquel día que vió todos los regalos que sus amigos habían hecho para él, le habían fascinado pero uno seguía siendo especial, tanto como el día que lo vio.

Aquella casa del árbol en la que ahora se encontraba, aquella hecha por Vegetta, aquel que había sido de gran ayuda los últimos días.

Ahora que lo pensaba detenidamente Vegetta estaba siempre para él, desde el primer momento en el que se sintió miserable, Vegetta siempre estaba ahí.

No tenía idea de como le hacía para estar en el momento preciso pero mucha de las veces lo agradecía de sobremanera, de no ser por él no sabía lo que hubiera pasado aquel día.

Tenía mucho que agradecerle, se había convertido en una parte fundamental en su vida.

Al estar con él se sentía seguro, disfrutaba de su compañía y le extrañaba cuando no le veía por un día entero.

Vegetta era para él lo que Akira era para Nieves.

-¿Qué? -se dijo a si mismo en voz alta en cuanto pensó en aquello.

No, no era lo mismo.

Lo que le dijo a su compañera iba más en broma, ya que no conocía a Akira lo suficiente como para saber que le gustaba la peliroja.

Era conciente de que, de todas sus amigas, Nieves pasaba más tiempo con Akira. Ambas tenían una linda amistad, solo eso, porque no conocía la relación de ambas, por eso era el mismo sentimiento para él y Vegetta.

Si, solo era amistad.

Ellos pasaban tiempo juntos porque se divertían, se entendían y complementaban.
Le extrañaba porque se acostumbró a estar acompañado desde lo ocurrido.
Prefería su compañía sobre la de los demás, porque eran amigos.

Además, lo de Mangel estaba reciente, no podía ser.

Vegetta no era más que el chico que le acompañaba cada que se sentía mal aunque no lo supiera, el tonto que adoraba sacar de sus casillas porque le parecía divertido ver su rostro molesto, aquel que podía sacarle una sonrisa al instante.

Aquel que ya tenía un lugar en su corazón.

-Mierda...-dijo, con una pequeña sonrisa acompañada de un par de lágrimas.

•~~~~~~~•

Volví y dejo en suspenso jsjsjs

Y me van a odiar más al saber que tardaré en actualizar.

No fue planeado pero estoy en finales (aunque casi todos los que conozco ya van a terminar) y no tendré tiempo ni para darme una vuelta por aquí, así que tenía de dos, no actualizar hasta acabar o darles por lo menos un cap.

Y pues aquí estamos, con una revelación bastante obvia pero que para nuestro osito le costo darse cuenta.

So, es todo por ahora, espero verlos pronto.

I H̶ᴀ̶ᴛ̶ᴇ̶ (ʟᴏᴠᴇ) ʏᴏᴜ || RᴜʙᴇɢᴇᴛᴛᴀDonde viven las historias. Descúbrelo ahora