I H̶ᴀ̶ᴛ̶ᴇ̶ (ʟᴏᴠᴇ) ʏᴏᴜ || Rᴜʙᴇɢᴇᴛᴛᴀ

34. You save me, again

Vegetta tenía el corazón acelerado gracias a que pensó que lo iba  a perder hace apenas unos minutos atrás.

Ahora le sostenía en sus brazos con un abrazo confortante, escuchandole llorar levemente.

Se mantuvieron así hasta que le dejó de oír. La adrenalina del momento comenzaba a pasar para el rubio, haciéndole sentir cansado al instante y logrando que comenzara a dormirse aún abrazando al contrario.

Vegetta se percató de esto una vez le dejó de escuchar sollozar pero no quería que alguien les encontrara y comenzara con las preguntas. Por lo que le cargó cuidadosamente para no despertarle y así poder irse a un lugar más adecuado.

No tenía un lugar en mente para que el chico pudiera descansar y después intentar hablar con él un poco, por lo que su única opción fue su casa.

Su plan era llevarle hasta su guarida de Lobo nocturno y así no levantar sospechas de quien era en realidad, esperaba que Rubius tuviera el sueño pesado para no ver a donde se dirigían.

Le fue un poco difícil llevarle en sus brazos y tratar de que nadie les viera pero lo logró.

Entrar y dejarle en su guarida no fue difícil, Rubius estaba lo suficientemente cansado como para quedarse dormido sin notar en donde estaban.

Verle recostado con la cara tan relajada le hacía parecer que todo estaba bien, que nada de lo ocurrido anteriormente había pasado.

Aún con todo eso, le seguía pareciendo lindo.

Luego de unos minutos más el chico comenzó a despertarse, con una mirada confundida en su rostro.

-¿Qué...?, ¿Donde...? -preguntó viendo a su alrededor- ¿Dónde estoy?

-Hola mon ami -dijo con su acento característico.

-Tú...me salvaste -dijo recordando lo sucedido- pero, ¿Por qué y...? ¿Cómo sabías que estaría ahí?

-Pensaba robagle algo a nuesgto querido policía, pero no pude si quiera endrar a su hogar -dijo pareciendo desinteresado- te vi y no me pareció cogrecto dejar que lo hicieras.

-No quería...al final, no lo iba a hacer -explico.

-Pero estabas a punto -Rubius suspiró- ¿Puedo saber pogqué?

-Era una idea tonta, no volveré a hacerlo.

-Y espero que así sea, no puedo salvagte todo el tiempo -Rubius río ante eso- eso me gusta.

-¿Hacer chistes muy malos?

-Verte reír.

Rubius se ruborizó un poco, se le hacía extraño llevarse bien con él.
El enmascarado le dió un poco de comida para recuperar fuerzas, mientras intentaba hacer una plática trivial para dejar el tema de lado.

No quiso volver con el tema, entendía que podría no emitirle confianza alguna, a fin de cuentas no se conocían de ese modo.

Para Rubius las cosas habían pasado bastante rápido y no sabía como sentirse al respecto. Estaba charlando con el chico que le acababa de salvar la vida y no parecía tener más interés en lo ocurrido, no le molestaba pero le parecía curioso que no preguntara un poco más al respecto.

Lo único que sabía es que estaba en deuda con él, quien sea que fuera el Lobo Nocturno.

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Sigo viva.

Aunque no se si alguien quiera matarme por tardar muchismo en actualizar.

No esperaba que el tiempo fuera tanto, pero entre una cosa y otra se prolongó.

De verdad que ahora si voy a actualizar seguido, estoy bastante inspirada estos días así que esta vez si es en serio.

También es porque tengo una idea de una fic que ya quiero realizar, pero me prometí a no hacerla hasta, como mínimo acabar esta.

Y bueno, ya les dejo un ratito, prometo actualizar está vez.