El Matrimonio Segunda Oportunidad

¿Realidad o Sueño?

Julietta

¡Julietta! ¡Julietta! ¡Vamos Despierta!—me gritaba la voz de Christiano. Sentía que estaba rodeada de agua, en algún momento me había quedado dormida.

Christiano. Me sobre salte al escuchar su voz. Estaba furiosa con el. Me levante de la tina donde estaba acostada entre sus brazos. El se sorprendió de mi comportamiento y corrió hacia mí. Yo había salido del baño y me estaba empezando a dar de cuentas que estábamos en el apartamento. Me gire y me le quede viendo. En su cara había una notable preocupación.

¿Cómo llegue aquí?—le exigí.

¿Qué como llegasteis aquí?—me pregunto confundió— ¿te sientes bien?

Dime. ¿Cómo llegue aquí?—le volví a exigir. Estaba muy confundida. Porque… porque  sentía una rabia hacia el por lo que había visto y lo ultimo que recuerdo es que Evangelina se había acostado conmigo en mi antigua habitación y de repente ¿me despierto aquí? Algo no estaba bien.

¿Quieres saber como llegasteis? ¿Es en serio?—me pregunto preocupado—no lo recuerdas—afirmo a ver que yo le asentía. Camino devuelta al baño y regreso con nuestras batas—toma póntela te vas a refriar si no te secas—dijo mientras me tendía la mía. Pensaba decirle que me respondiera cuando el volvió a hablar interrumpiéndome—siéntate—me indico señalando la cama—te contare. Pero quiero que sepas que me preocupa tu falta de memoria, creo que deberíamos llamar al medico—suspiro y un pequeño reflejo de tristeza paso por sus ojos—pero te contare. Llegamos hace aproximadamente hace dos horas de la hacienda, y al salir del aeropuerto te traje para acá para que estemos solos—me quede fría. ¿Cómo que acabábamos de llegar hace dos horas?

¡Espera! ¿Me estas diciendo que apenas hemos llegado a la ciudad y no hemos salido de este apartamento?—le pregunte.

Si. Julietta dime que te sucede—me dijo preocupado.

Yo… yo… no se—dije mientras miraba a todas partes buscando una respuesta a esta locura. Era como si me fuera despertado en otra dimensión o en el pasado. Era como si estuviera soñando. Soñando ¡Eso es! ¿Y si fue un sueño?—veras te hace unas series de preguntas y tu responderás—el asintió—sabes que cero preguntas te cometeré todo—le dije—pasa que estoy muy molesta contigo. Y estoy confundida porque resulta que cuando estábamos en la fiesta en casa de tus padres te vi besándote con la pelirroja con la que pasasteis toda la noche y cuando fuiste a mi habitación fuiste incapaz de negarlo—le reclame. El me miraba con cara de confundido y preocupación por mi salud mental.

Voy a llamar al medico—dio y se paro en busca de su celular.

¡Christiano!—le grite y se volteo a verme—explícame—le dije casi llorando—dime que lo soñé, por lo menos, así sea para tranquilizarme—al verme llorar su cara se suavizo y regreso a abrazarme.

Amor. Cálmate, y si creo que fue un sueño—me decía mientras me mecía entre sus brazos. Luego me tomo la cara entre sus manos y me hablo mirándome a los ojos--¿de verdad me crees capaz de hacerte eso?—negué con la cara—Julietta, sabes que estoy loco por ti. Y de verdad creo que tuviste una pesadilla porque a eso no se le puede llamar sueño amor—dio mientras me daba besos en la frente— ¿dicen que Evangelina estaba contigo? Llámala y pregúntale para que estas mas tranquila.

Eso voy hacer—dije mientras me salía de sus brazos y busca el teléfono. Al encontrarlo busque en el directorio el número de Evangelina. Y le di marcar. Al cabo de un rato atendió.

¡Julietta! ¿Dónde andan? Pensé que vendrían con nosotros después del aeropuerto—dijo.

Eva. Necesito contarte algo—dije. Y le comencé a narrar todo ella escucho callada todo lo que le contaba. Le conté todo lo que recordaba desde que había salido supuestamente desde este apartamento hasta el haberme acostado en ella en mi antigua habitación y digo supuestamente porque ya lo estoy poniendo en dudas. Cuando termine de contarle ella silbo indicándome lo sorprendida que estaba.