Ser Otro...!!

25K 1.7K 94
                                    

Christiano

Julietta me esta volviendo loco. No encuentro de que manera descubrir que vuelva hacer la que era antes. Y todo por Katherine. Siempre me había burlado de aquellos que decían que entender a las mujeres era un total enigma. Que cuando se era un hombre soltero, mujeriego y no un hombre enamorado. Todo era más fácil porque así no tenias que preocuparte en entenderlas. Pero que al estar enamorados era peor. Porque bastaba con que ellas se medio enojaran contigo, y sin decirte el porque. Que hacia que uno se trastornara buscándole el sentido y la solución.

Y todo por culpa de estar enamorado, no es algo malo pero, el amor hace que uno el hombre quiere hacer todo por esa chica. Quiere entenderla y adelantarse a sus deseos para así cumplírselos. Pero... es imposible. Son complicadas, arrogantes y vengativas.

O por lo menos la que me toco a mi, me la esta aplicando y bien fea. Llame a la única persona que conocía mejor a Julietta que el propio Marcos. Llame a su padre.

Después de pasar alrededor de una hora hablando por teléfono y disculpándome y asegurándole que solo era un mal entendido el me a claro las ideas.

Tranquilo, Christiano. Se que si no fuera un mal entendido, nunca me hubieras llamado—me dijo. Luego se quedo en silencio y retomo la llamada— ¿esto por casualidad paso el día de la boda?—pregunto.

Si—le respondí.

Ya decía yo que tú estabas raro y ni decir de mi princesa—suspiro—como la conozco. Te voy a decir lo siguiente. Hijo. Ella solo te esta castigando. Si algo tiene esa niña es que sabe ser mala cuando quiere. El propio Marcos te puede de contar la más de veces que ella le hizo la ley de hielo. O como cuando se pelearon una vez y delante del pobre marcos decía que ella no tenía primo. Y lo hizo llorar por dos semanas enteras. Te aseguro que cuando ella sienta que aprendiste la lección te levantara el castigo—a christiano poco a poco le volvía la esperanza, solo tendría que tener paciencia—obsérvala mucho. Has todo lo contrario a lo que ella crea que harás. Si hace cualquier cosa para provocarte tú aguanta y no sedas. Demuéstrale que eres otro. ¿Si busca las maneras de hacerte dar celos? Que conociéndola lo hará, tú juega sucio, y no me refiero que dándole celos, sonríele voltea la tortilla como dicen. Y hasta vuélvete amigo de tu enemigo. ¿Me entiendes?—me pregunto.

Claro que lo entiendo—le respondí con esperanzas. Sus consejos lo pondrían en práctica—muchísimas gracias.

De nada hijo solo. Una cosa mas—dijo—ni se te ocurra venderme. Si Julietta se entera... no quiero pensar que me querrá hacer de venganza—lo último lo dijo en risas—cuídala mucho y cuanta conmigo para lo que quieras.

Gracias—dije. Finalizamos la llamada.

Me senté en el banco que estaba junto a la piscina. Jugaría como mi suegro me acaba decir. Mire la hora en mi teléfono. Apenas eran las 9pm y los chicos no habían llegado. Habían salido con Julietta y el tal Scott. Pero las palabras de mi suegro volvieron a mí.

¿Si busca las maneras de hacerte dar celos? Que conociéndola lo hará, tú juega sucio, y no me refiero que dándole celos, sonríele voltea la tortilla como dicen. Y hasta vuélvete amigo de tu enemigo. ¿Me entiendes?

Una gran sonrisa se dibujo en mí. ¿Ella quería jugar? Ja¡ pues ya vería. Así me retuerce por dentro de celos. Le demostrare que soy otro.

Prepare una gran bienvenida a su salida. Ya que ella misma me había mandado un texto indicando que llevaría a Scott a la casa junto con los amigos de el, y que por favor me comportara. Le pedí al encargado de cuidar a la casa de que me preparara la parrillera mientras yo salía a comprar unas cosas. Volví rápido y comencé a sazonar la carne que había comprado. Prepare los vegetales y pique el pan para las hamburguesas. Solo faltaba que ellos llegaran y iniciaría el juego.

Como si los fuera invocado entraron a la casa. Ella venia tomada de las manos con el tal Scott. Estuve apunto de salir corriendo y partirle la cara, descombrándome en el camino el golpe que me había dado también. Pero respire profundo y me les acerque con la mejor de mi sonrisa, esa sonrisa que sabia que la desarmaba.

Hola—dije mientras me colocaba enfrente de ellos—al fin llegan—dije. Julietta se me quedo mirando muy extrañada. Pero el lo que vio que la miraba se hizo la loca.

¿Nos esperabas?—pregunto Evangelina.

Si. Los esperaba ya que ustedes son incapaces de hacer participe de sus planes a uno. Decidí hacer mi propio plan y esperarlos para invitarnos—dije muy animado. Tengo todo listo para preparar unas hamburguesas mientras vemos el partido—al pronunciar partido, los amigos de Scott comenzaron a prestarme atención.

¿Cuál partido?—pregunto uno de ellos.

En la tarde vi que hoy jugaba el equipo de basquetbol de aquí. No soy muy aficionado a ver juegos en la TV pero me pareció una excelente idea para poder conocernos mas—les dije. La cara de Marcos, Evangelina y la propia Julietta eran un poema. Se les veía en la cara que no entendían mi actitud—es mas iba a buscar unas cervezas a la casa cuando vi que llegaron quien me ayuda a traerlas—pregunte y al ver que nadie se ofrecía—Scott me acompañas. Así aprovecho para hablar contigo y pedirte disculpas.

Julietta

El estaba completamente loco. Desde cuando quería compartir con Scott.

Me encontraba totalmente desubicada con lo que mis ojos veían. Scott me dejo y se fue con Christiano. Y se veía que estaban hablando tranquilamente. Christiano se vea tranquilo y Scott algo dudoso pero poco a poco se veía mas relajado. Hasta logre ver como se reían.

¿Cristiano estaba tramando algo?¿ o solo eran ideas mías?

El Matrimonio Segunda Oportunidad Where stories live. Discover now