14. Un escape para nada perfecto

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-¡Louis! ¡omega!

Fue lo único que Harry pudo decir al verlo cerrar pesadamente esos azulados ojos que se habían vuelto casi cristalinos al perder tanta sangre.

Las lágrimas bajaban sin permiso por sus mejillas, nublando su vista, estaba asustado, más que nunca y su alfa estaba tan alborotado, estaban tan nervioso, retorciéndose en su interior y pensando lo peor, que Louis muriera, que lo dejara en ese horrible mundo sin él, lo que le cortaba la respiración y amenazaba con quebrar su alma si en realidad estaba muerto.

Con su mano ensangrentada, llena de ese líquido espeso, brilloso y fresco que goteaba a la arena de esa oscura playa, tomó su manita fría y afortunadamente aún tenía pulso, uno débil, pero su corazón seguía palpitando y eso lo ayudó a volver en sí.

Debía ayudarlo, debía hacer algo para salvarlo, lo que fuera, y sabía que debía pararse e ir por ayuda, pero no iba a dejarlo, no quería dejar su lado, no podía, su lobo se lo impedía y lo había dejado en shock al ver el gran charco de sangre en el que estaban, charco que se estaba haciendo lentamente más y más grande con cada segundo que pasaba.

-Harry ¿qué pasó?

Preguntó Björn apareciendo junto a ellos y viendo a su hijo que se desangraba a la orilla de esa oscura playa, viéndolo con un terror en los ojos que nunca había visto en él y cambiando su aroma a uno lleno de angustia.

-Se está... está desangrando, hay que hacer algo... hay que...

Empezó a balbucear sin saber qué decir y con su lobo exigiéndole que hiciera algo, que fuera un buen alfa y que diera su vida misma si era necesario con tal de que el omega volviera a abrir los ojos.

-¿Cómo se la hizo? - volvió a cuestionar el brujo, interrumpiendo sus frases sin sentido.

-Me salvó la vida - intervino Zayn llegando a la escena y mostrando la misma herida en su pecho, pero en forma de cicatriz.

Una cicatriz roja, morada y algo brillante que parecía que quemaba al roce, como la que Louis se había hecho hace casi dos meses, salvando a Galtie, quien estaba junto a ellos, haciendo soniditos de preocupación y gruñendo levemente ante el estado de su dueño, de la persona que más quería.

Solo entonces supo que había sido su omega, que su omega se había pasado el dolor de Zayn, llevándose su cicatriz.

Solo su omega, y su disposición a salvar a todo el mundo, podía hacer eso y lo había llevado hasta allí, al borde de la muerte de ambos, pero salvando una vida que seguramente consideraba mucho más valiosa que su misma vida.

-Hay que cerrarla - habló Björn trayéndolo de vuelta a la realidad.

Una horrible realidad donde Louis agonizaba, donde peleaba entre la vida y la muerte, necesitando una gran ayuda para que lo segundo no ganara.

- Tenemos que volver a Sigrid.

-Harry tú deberías acompañar a las tropas hasta Vanja, ya van en camino - sugirió Liam.

Después de todo, los aliados habían ganado esa batalla gracias a Niall y su estrategia para quemar a la bruja y que Vanja pidiera la retirada.

Pero no le importaba, si de una cosa estaba seguro es que él no iba dejar el lado del omega, ni loco, ni muerto, esto era mucho más importante que toda la estúpida guerra que lo había llevado hasta allí.

-No, él me salvó la vida.

Respondió el rizado, negando con la cabeza al imaginarse esa improbable escena, sin soltarlo y reprimiendo un: y es mi omega.

Runaway [Larry Stylinson]Where stories live. Discover now