21. La solución perfecta

210 25 62
                                    

Harry estaba más que impactado.

La herida en su hombro había pasado a segundo plano al contemplar la muerte del brujo que tanto había ayudado a Sigrid, al ver como alguien en quien los cuatro brujos habían confiado, los traicionaba y lo asesinaba a sangre fría con un afilado hielo que había perforado su pecho de una manera realmente dolorosa y horrible de ver, que le había arrebatado dos de los regalos más preciados que alguien pudiera tener: tiempo con sus cachorros y la vida misma.

Odín se los había quitado como si no fueran nada, como si no valieran nada, como si no fueran mas que un precio a pagar por alguna cosa mucho más importante que el brujo.

Björn estaba muerto en el patio de su casa, en medio de esa villa mágica, Lena estaba destrozada, llorando desgarradoramente, Astrid y Louis estaban en shock y él no sabía qué hacer, no sabía cómo ayudar, es más, no sabía si podía hacer algo para ayudar.

Se paró del suelo en donde estaba tirado desde que Odín lo había herido y se acercó hasta donde el brujo yacía muerto con un hoyo enorme en el pecho y sangre, mucha sangre a su alrededor, alertando a su lobo porque esa escena era horrible y no quería que Louis estuviera allí, no quería que estuviera en medio de todo ese horrendo caos, en medio de ese enorme charco de sangre que solo significaba que había una nueva amenaza para él, que había un nuevo peligro del cual su alfa le exigía que lo protegiera.

Se arrodilló en el piso y abrazó a su omega, quien apenas tomó en brazos empezó a llorar fuertemente, aferrándose a él como si su vida dependiera de eso, haciendo que el corazón de Harry amenazara con romperse y que lágrimas estuvieran a punto de salir de sus ojos al ver a su compañero así, sabiendo perfectamente que estaba destrozado, que le estaba doliendo demasiado perder a ese especial ser que se había ganado su cariño, que se había ganado el cariño de ambos y siendo perfectamente conscientes que los había dejado, que había dejado ese horrible mundo y que no lo volverían a ver.

Louis se separó de él más pronto de lo que Harry hubiera querido y prácticamente se abalanzó a Lena, para que luego Astrid hiciera lo mismo, ambos abrazándola fuertemente porque sin duda ella era la más afectada, había vivido con Björn desde hace cinco años, era la que tenía el vínculo más fuerte con su padre, la que más lo quería.

-Voy... voy por ayuda.

Avisó Harry parándose sin saber qué más hacer y su omega negó con la cabeza, mirándolo aún con lágrimas saliendo de sus azules y tristes ojos.

-Está muerto, alfa, no hay nada que se pueda hacer.

-Odín puede volver.

Respondió Harry y volteo hacia el dragón que corría hasta los tres brujos y se arrodillaba para igualmente abrazar a Lena y llorar con ellos porque la pérdida también le había afectado demasiado a él.

- Niall....

-Yo los cuido, ve - interrumpió el dragón asintiendo y frunciendo levemente el ceño aún con lágrimas bajando por sus pálidas mejillas.

-Omega, en serio lo siento mucho - volvió a hablar Harry con la voz entrecortada y a nada de ponerse a llorar también.

Y Louis lo miró con los ojos vidriosos, que denotaban lo afligido que estaba, pero sin perder ese aire característico de querer ayudar a todo el mundo.

-Ve en Galt.

-No podría.... - empezó a negarse ante subirse a su bestia alada, menos si iba solo.

Pero Galt, que Harry no sabía en qué momento había llegado a esa escena, se acercó a él y le dio un leve golpe con la cabeza, como si realmente supiera la gravedad del asunto que estaban atravesando y quisiera que aceptara en ese momento para quitarle cualquier preocupación al castaño que siempre cuidaba como su propio ángel que ahora quería prestarle a Harry.

Runaway [Larry Stylinson]Where stories live. Discover now