CAPÍTULO TREINTA Y SIETE

5.7K 652 96
                                    

Hacer meditar a Wei Wuxian era una misión imposible para Lan Wangji.

Y es que el temido cultivador demoníaco no dejaba de besarlo cada vez que el Lan cerraba los ojos.

—Wei Ying concentrate. Tú núcleo necesita meditación.

Wei Wuxian hizo un puchero y se acomodo en el regazo de Lan Wangji para cerrar los ojos y empezar a meditar.

Lan Wangji se alegró cuando Wei Wuxian parecía no quererlo atacar, por lo que empezó a meditar y a pasar energía espiritual a Wei Wuxian colocando su mano en el lugar de su dantian inferior.

Wei Wuxian sonrió cuando sintió la energía de Lan Wangji.

—Ergege, dijo moviendo las caderas.

Lan Wangji sonrió y besó la sien del joven.

—Te amo. Dijo en un tono bajo.

Wei Wuxian sonrió y se dispusieron a meditar no sin antes torturar un poco a su prometido.

—HanGuang-Jun, si me besas una hora, meditare media. ¿Qué te parece?

Lan Wangji apretó el agarre en Wei Wuxian.

—Si meditas tres horas, te daré un premio.

Wei Wuxian volteó a ver a Lan Wangji.

—¿Hablas enserio?

—Mnn...

Wei Wuxian sonrió.

—¿Lo que yo quiera? Preguntó.

—Mnn...

—Anota tus palabras Lan Zhan. Advirtió.

Lan Wangji besó el cabello de Wei Wuxian cuando este se dispuso a meditar enserio.

Lan Wangji sabia que tendría que acceder a los caprichos de Wei Wuxian, quien se comportaba como un mocoso malcriado cuando quería.

Lan Xichen habia establecido una regla propia, no molestar a su hermano cuando estaba con Wei Wuxian. Así que buscó a Nie Mingjue para pasar el resto del día mientras conversaban sobre la elección de Cultivador en Jefe.

—Xichen, tu tío tiene altas probabilidades contra Jin Guangshan.

—Lo sé Da-ge, solo me preocupa su salud.

Nie Mingjue sonrió.

—Podrá tener pupilos que se encarguen de las visitas, tu hermano, Wei Wuxian e incluso Huaisang pueden asumir la tarea.

Lan Xichen encontró eso muy acertado.

Nie Huaisang había escuchado todo, huyó cuando supo que él sería un posible ayudante del cultivador en jefe. Caminando mientras se lamentaba de su suerte se encontró con una escena interesante.

Jin Guangyao discutía con Qin Su acaloradamente.

—A-Su, si ya te deshiciste del niño, ¿qué más quieres?

Qin Su mantenía su mano en un puño.

—¿Qué más quiero? Hacer que Jin Guangshan pague por habernos arruinado la vida.

Jin Guangyao negó.

—Mis planes están antes que tu sentir A-Su, pagará cuando sea el momento.

Qin Su estaba furiosa.

—¿No lo entiendes? Nosotros dormimos juntos siendo medios hermanos, me embarace de un hijo de mi propio hermano.

Jin Guangyao se rió.

FÓRMULA PARA ENAMORARWhere stories live. Discover now