CAPÍTULO CUARENTA Y DOS

5K 624 100
                                    

—¿Por qué no sólo nos dices que quieres? Preguntó. —¿Tienes hambre? O en su defecto, ¿Quién te envío? Preguntó Wei Wuxian.

—¿Quién querría vigilarte? Preguntó el niño de vuelta.

Wei Wuxian rodó los ojos.

—¿Quieres venir a comer con nosotros? Preguntó.

Xue Yang volteó el rostro.

—Oye, ¿te estoy ofendiendo al ofrecerte comida? Preguntó Wei Wuxian.

—Quién tiene el dinero es el de blanco. Respondió.

Wei Wuxian jadeo escandalizado.

—Para que lo sepas, lo que es de él es mío.

Xue Yang se burló.

—¡Nos casaremos! Dijo. —¡Incluso ya adoptamos a nuestro primer baobao!

Xue Yang lo vio seriamente.

—¿Adoptar?

Wei Wuxian asintió.

—Si, formaremos una gran familia.

El niño vio a A-Yuan con una gran sonrisa mientras Lan Wangji jugaba con él con una espada de madera.

—Tal vez te parezca raro, pero realmente pretendemos ser una familia.

—Las familias te abandonan. Dijo Xue Yang molesto.

—¿Eso te pasó? Preguntó Wei Wuxian, ganándose una dura mirada.

—Está bien, no me digas, pero mi oferta para que comas con nosotros sigue en pie.

Xue Yang se aseguró de no estar vigilado y aceptó.

Lan Wangji no se sorprendió de ver al niño junto a Wei Wuxian, en cambio le preguntó que deseaba ordenar.

Xue Yang se sentía confundido, pero pidió los platos caros, ese par de cultivadores estaban vestidos con telas caras, así que no tenía nada de malo. Ese acto hizo reír a Wei Wuxian.

A-Yuan tomó la sopa dulce en el regazo de Lan Wangji, quien cuido que su hijo no derramara la comida en su ropa.

—¿Estás bien con eso? Preguntó Wei Wuxian a Xue Yang, quien había estado viendo la interacción de Lan Wangji junto al pequeño.

—¿Por qué acogieron a un niño que no es suyo? Preguntó.

Wei Wuxian y Lan Wangji intercambiaron miradas.

—Es nuestro. Dijo Wei Wuxian. —Sus padres murieron en la guerra y su familia nos confío su crianza y educación.

—Pero es extraño que lo traten como a un hijo.

—Porque lo es. Respondió Wei Wuxian. —Yo mismo fui adoptado por el antiguo líder de la secta Jiang y su esposa, me crié como el hermano mayor del actual líder Jiang y el Didi Lady Jiang.

Xue Yang alzó las cejas.

—¿Tus padres también murieron? Preguntó el niño mientras volvía a comer.

—Si, lo hicieron cuando tenía alrededor de cuatro o cinco años. El tío Jiang fue amigo de mis padres y me acogió cuando me encontró.

Xue Yang asintió.

—No todos tienen esa suerte. Dijo mientras bebía su té.

Por el rabillo del ojo, Lan Wangji notó que al pequeño le hacía falta el dedo meñique.

No dijo nada, en cambio le sirvió más té y le pasó un poco de carne ya cortada.

El niño sonrió contento de ser agasajado así.

FÓRMULA PARA ENAMORARWhere stories live. Discover now