CAPÍTULO CUARENTA Y NUEVE

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Wei Wuxian estaba disfrutando enormente el cultivo dual con Lan Wangji.

Boca abajo, con sólo las caderas al aire, retrocediendo para encontrarse con las embestidas de su pareja, el cultivador apretaba las sábanas y ahogaba los sonidos lascivos en las almohadas, pues sus hijos podrían escucharlos al estar a la par de su habitación.

Lan Wangji también disfrutaba de todo, más de la vista.

Wei Wuxian estaba sonrojado y sudoroso, su cabello húmedo, sus ojos cerrados y una expresión de satisfacción que lo alentaba a seguir.

Además, tenía en sus manos los perfectos y tonificado glúteos de Wei Wuxian. Esta vez había estado muy reprimido sin su sesión de cultivo dual debido a que ya eran padres, por lo que los estaba apretando a su gusto.

Mientras embestia vio como la piel temblaba levemente por el movimiento. Sin poder resistirse, le dio un manotazo a una de las nalgas de Wei Wuxian y se maravilló con el color que tomó y el movimiento interno que el golpe causó, apretandolo de una manera distinta.

Wei Wuxian no lo registró por completo debido a que Lan Wangji lo estaba jodiendo demasiado bien.

Lan Wangji se acercó a Wei Wuxian cerniendose sobre su cuerpo.

-Wei Ying, amor, permiteme azotarte. Pidió.

La petición dejó a Wei Wuxian en blanco.

-¿Quieres pegarme? Ah... Lan Zhan, sigue así, muévete así, joder...

Lan Wangji sonrió mientras continuaba su movimiento.

-Quiero azotar tu trasero. Dijo. ¿Puedo?

Wei Wuxian se negó.

-Tienes una tremenda fuerza en los brazos. Si lo haces lloraré.

-Medire mi fuerza. Prometió. -¿Puedo?

-Voy a arrepentirme. Dijo. -Hazlo, pero si te digo que pares, lo harás.

Lan Wangji asintió muy feliz y después de besarlo volvió a su antigua posición.

El primer azote lo dio cuando golpeó a Wei Wuxian directamente en la próstata.

Siguió dando en ese lugar mientras dio tres golpes más.

A Wei Wuxian no le gustaron, le dio miedo ser golpeado, pero Lan Wangji sintió la gloria cuando Wei Wuxian se apretó alrededor de él en cada golpe que dio.

Cuando golpeó dos veces más Wei Wuxian soltó un quejido y enterró el rostro entre las almohadas.

-Wei Ying... Llamó Lan Wangji deteniéndose completamente y saliendo de Wei Wuxian.

Wei Wuxian sollozo de inmediato.

-No me gusta Lan Zhan, no me pegues. Se quejó.

Lan Wangji se asustó y volteó a Wei Wuxian quien tenía lágrimas en los ojos.

-¿Te lastimé? Preguntó.

Wei Wuxian sintió como Lan Wangji se alejaba de él y empezó a llorar nuevamente.

-¡No! Y no te alejes, ¿por qué saliste? Abrázame, bésame, jodeme pero no me pegues, lo odio Lan Zhan.

Lan Wangji estaba asustado.

-Wei Ying...

-Ni se te ocurra decir que vamos a parar, solo sigue, sin golpearme, puedes manosearme.

Lan Wangji asintió un poco asustado. Wei Wuxian nunca había llorado de esa manera.
Fue por ello que decidio cambiar de posiciones, pero Wei Wuxian se negó.

FÓRMULA PARA ENAMORARDonde viven las historias. Descúbrelo ahora