CAPÍTULO CINCUENTA Y DOS

4.4K 590 104
                                    

El último día de estancia en Qinghe llegó.
Esa mañana Wei Wuxian se había levantado temprano debido a que Mo Xuanyu apareció en su cama y la de Lan Wangji.

-Lan Zhan, despierta, A-Yu está aquí, creo que A-Yang y A-Yuan están haciendo de las suyas de nuevo.

Lan Wangji abrió los ojos y vio a Wei Wuxian sosteniendo a su bebé.

-Hola, Lan Zhan. Saludó.

El corazón de Lan Wangji se derritió al ver a Wei Wuxian con un bebé en brazos, despeinado, y con la túnica mal arreglada. Todo tan doméstico, todo tan perfecto.

Se sentó y besó en la frente a su pareja y un pequeño beso a su bebé.

-Hola Wei Ying, hola A-Yu.

Wei Wuxian sonrió.

-Amado Lan Ergege, tendrás que ir a ver a nuestros otros dos bebés.

Lan Wangji asintió.

-¿Necesitarás un biberon? Preguntó.

Wei Wuxian sonrió al ver a Xuanyu dormir.

-Creo que sí.

Después de vestirse rápidamente Lan Wangji consiguió el biberon y busco a sus hijos.

A-Yuan estaba con los Wen.

-Creo que A-Yang fue con su excelencia. Dijo Wen Ning.

Lan Wangji fue a buscar a su tío.

Lan Qiren estaba junto a Lan Xichen cuando Lan Wangji llegó.

-¿A-Yang? No, el no ha venido. Dijo el mayor.

Lan Wangji frunció el ceño y salió a buscarlo.

Veinte minutos después, Xue Yang no aparecía por ningún lado.

Lan Wangji llegó con Wei Wuxian quien ya estaba cambiado y listo junto a Mo Xuanyu.

-¿Lan Zhan? Preguntó

Wei Wuxian al ver a su prometido pálido.

-Wei Ying, A-Yang no aparece.

Jiang Yanli se ofreció a quedarse con Mo Xuanyu mientras los Wen con A-Yuan, así los padres buscaban al niño.

En toda la mansión no había rastro de él y Nie Mingjue ordenó que se buscara al niño por todos los lados.

Wei Wuxian estaba asustado.

¿Y si Xue Yang había decidido irse?

Lan Wangji tomó a Wei Wuxian para encontrarse con Lan Qiren.

Nie Mingjue recordó a un pequeño Nie Huaisang experto en esconderse.

-Busquen en los jardines, y en la armería, Huaisang disfrutaba escondiéndose allí.

Pero Xue Yang simplemente no apareció.

Wei Wuxian se acercó a Nie Mingjue.

-Chifeng-Zun, quisiera convocar espíritus para que rastreen a mi hijo.

Nie Mingjue no pudo negarse al ver el rostro preocupado de Wei Wuxian, al borde del llanto.

-Hazlo. Dijo el líder.

Wei Wuxian invoco alrededor de quince fantasmas para que buscarán a Xue Yang.

Lan Xichen y Jiang Cheng salieron de la mansión al pueblo para empezar a buscarlo, mientras su séquito cubría áreas lejanas.

-Soy un mal padre. Dijo Wei Wuxian a Wen-popo.

La mayor sonrió y lo consoló.

-Wei-gongzi, los niños son terriblemente traviesos. Mi difunta hija una vez se subió a una carreta jugando, la encontramos a los dos días.

FÓRMULA PARA ENAMORARDonde viven las historias. Descúbrelo ahora