74. ¿Quién los mando?

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-"¡Soy Du Yuzhang, el primer ministro de Dayan! ¿Acaso no te lo dijo la persona que te mando?"

En el momento indicado Du Yuzhang gritó. Sabía que ni siquiera los forajidos ofenden fácilmente a las personas en la burocracia. Dado que desde la antigüedad la gente no peleaba con los oficiales, ¡Además el precio por ofender a los oficiales era demasiado alto!

Efectivamente, la velocidad de la caída del palo sobre el vaciló por un momento. Du Yuzhang vio esperanza en esa acción y continuó gritando:

-"Se que haces esto solo por dinero. Yo también tengo un poco de dinero e incluso más que el suficiente como para poder comprar la casa más grande y lujosa de la calle de los príncipes: Soy Du Yuzhang, un gusto. ¿Cuánto te dieron? Te daré diez veces más de lo que te dieron. Puedes considerarlo como una forma de hacer amigos, Por si necesitas ayuda en el futuro ".

Cuando salieron estas palabras, todos los matones lo miraron y el los miro de regreso. Todos dudan.

Du Yuzhang se sintió aliviado. Sabía que este tipo de personas hace el mal solo por dinero.

Primero mostro su estatus y luego los sedujo con darles diez veces más el precio que les ofrecieron. La última frase "ayuda en el futuro" implica que Du Yuzhang no sólo no entra en conflicto con ellos, sino que también puede hacer uso de sus servicios en el futuro.

Du Yuzhang quería usar este párrafo para insinuarles que no tenía intención de informar al funcionario sobre ellos, para así poder disipar sus preocupaciones. El resto es sobre dinero. Y Du Yuzhang efectivamente es la persona a la que menos le hace falta el dinero.

Lo que le falta es tiempo. Mientras más se retrase, podría llegar la persona que Li Guangning envíe para ayudarlo, lo cual solo causaría más problemas.

- “¿Crees que tan pronto como abras la boca, te creeremos?” El rostro de un matón se hizo ver, era fuerte, le sonrió con desprecio y mostró sus dientes amarillos. “¿Dijiste que eras el primer ministro? ¡Entonces también te digo que yo soy el emperador!”

Los matones se echaron a reír a carcajadas, y Du Yuzhang también sonrió.

-"Bien. No importa quién sea yo... y eso no quita que ustedes estén aquí solo por dinero. Tengo una pequeña bolsa de dinero conmigo. Aunque no cargo mucho dinero en este momento, también puedo darte un regalo. En cuanto a lo que dije anteriormente, en verdad estoy dispuesto a hacer amistad con ustedes. La ayuda mutua entre amigos es, naturalmente, lo mejor en esta pequeña conversación entre nosotros”.

Después de decir eso, Du Yuzhang sacó la bolsa de dinero de sus brazos. La bolsa era pequeña y estaba plana en la palma de la mano de Du Yuzhang. Parecía que incluso si hubiera plata en ella, no habría mucho dinero, que tonto.

- “Somos pobres. ¿En verdad quieres deshacerte de ese poco dinero tuyo? ¡Incluso el dinero de mi hijo en su bolsillo pesa más que la tuya!

Tiene razón, si se trata de monedas de plata, la bolsa de dinero de Du Yuzhang es demasiado pequeña como para contener algo.

Pero esos matones no saben que Du Yuzhang nunca carga dinero en efectivo, excepto por el pequeño carbono de oro.

El billete de plata es la moneda más valiosa en en Daxian.
Sin embargo, la mayoría de la gente en Dayan nunca lo ha visto en toda su vida.
Debido a que el valor nominal mínimo de un billete de plata es cien liang de plata, con el cual puede comprarse una buena casa con tres entradas y salidas.

Cuando Du Yuzhang sacó el primer boleto plateado, el desprecio en las caras de los matones desapareció.
Cuando sacó el segundo boleto plateado, estuvieron en completo silencio, que incluso se escucharon a los cuervos por todos lados.
Cuando saco el tercer billete plateado, el palo de madera en la mano del líder matón cayo.
Le siguió un sonido metálico, era el sonido de un matón que no podía sostener el arma en su mano, y su espada había caído al suelo.

... con tanto dinero a su disposición, estos cabrones son el producto más bajo del mercado ¿Dónde has visto esta escena?

Pero la mano de Du Yuzhang no se detuvo. Uno tras otro, una pila de boletos plateados fueron alineados como un abanico plegable en su mano.
Los ojos de los matones se abrieron y sus bocas se agrandaron. La luz codiciosa en sus ojos casi quemó la pequeña pila de billetes de plata.

Du Yuzhang miró a su alrededor y sonrió.

-"Lo siento, es muy poco dinero, no lo tomen como una falta de respeto. Por favor, no se disgusten conmigo".

—¿Disgustarnos? ¡Si no tuviéramos una pequeña razón para no hacerlo, todos nos arrodillaríamos y honraríamos a ti Du Yuzhang como si fueras un gran héroe de nuestros antepasados! —

El hombre de alto rango que les ordeno a venir a por el solo dijo que le dieran una buena paliza y que si lo hacían bien les daría plata sin fin por toda su vida. Pero quién sabe si lo que dijo es mentira o verdad, ¿cuánto dinero les podría dar? En cambio, la persona que está frente a ellos es diferente. Saco decenas de billetes de plata. Oportunidades como estas solo hay una ves ¡Si toman una mala decisión no podrán disfrutar de ese dinero en esta vida ni en la próxima!

-"... no, no, Sr. Du! Sr. Du, ¡fue nuestra culpa ofenderlo hace un momento! ¡Ven, ven, tómate un descanso aquí! A partir de hoy, seremos hermanos tuyos.”

-"Eso es realmente bueno, estoy muy feliz de hacerme amigo de ustedes”.

Du Yuzhang sonrió y le entregó un billete plateado al matón frente a él.

El matón nunca había visto tanto dinero en su vida. Sus piernas estaban débiles y cayó de rodillas. Parecía como si se hubiera inclinado ante Du Yuzhang.
Du Yuzhang no lo miró, pero sonrió y le preguntó al líder matón. frente a él,

-"Sólo hay una cosa más que deseo preguntarles, ¿Puedo saber quién los envió aquí a mi encuentro?".

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