ʚ♡ꜝֶָ֢ ƚɾҽʂ

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Para Chifuyu la parte más difícil de ser padre, fue aceptar que eran solo él y su hija contra el mundo

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Para Chifuyu la parte más difícil de ser padre, fue aceptar que eran solo él y su hija contra el mundo. No iba a ser simplemente el hecho de tener que asumir que un día inevitablemente llegarían las preguntas y conversaciones incómodas, sino también que habría situaciones que terminarían por salírsele de las manos.

Chifuyu tuvo que asumir la responsabilidad de una paternidad a la corta edad de 17 años, cuando las aventuras y desastres aún eran necesarios para adquirir una verdadera madurez.

Por aquel entonces aún sostenía una relación estable con Ryusei Satou y aunque a Mikey siempre le pareció demasiado engreído, debía de aceptar que para sus ojos Chifuyu fue la adoración hecha carne.

O bueno, al menos hasta que la ignorancia de Ryusei llego al fin.

— ¿Un bebe? —Ryusei pregunto con una mueca que poco a poco deformaba más su cara.

Chifuyu no sabía como tomarse aquella reacción, pero quiso pensar que era por el shock del momento. Pero esa mueca solo era la base y muestra de su vil desgracia.

— ¿No suena emocionante? —Sonrió, con esa sonrisa que engatusaba a cualquiera. A Ryusei lo engatuso de más, por ejemplo— Digo, sé que aún somos jóvenes, pero juntos podríamos ser muy buenos padres.

— No lo creo.

— No seas pesimista Ryusei.

— Abórtalo.

— ¿Qué? —Susurra horrorizado— ¿E-es una broma no?

— ¿Te parece que es una puta broma?

Chifuyu al menos si quería creer que era una "puta broma", por qué Ryusei de verdad no podía estar hablando en serio.

Por qué Chifuyu ni siquiera podía contar con los dedos cuantas veces habían fantaseado con tener una familia a lo largo de su relación. Se imaginaron e incluso soñaron despiertos en que mansión a la otra punta del mundo vivirían o a lo mejor como se verían sus futuros hijos.

Sí sacarían los ojos acaramelados de Ryusei.

O quizás el rubio oro de Chifuyu.

— Tiene que serlo —Exclama Chifuyu con seguridad, esta vez en un tono que ni siquiera el viento sea capaz de pasar desapercibido su juramento— No puedes estar hablando en serio Ryusei. Tú... ¡Tú en serio no puedes estarme diciendo eso! ¡Es que es nuestro bebe!

— ¿Crees que estoy listo para la responsabilidad que todo eso conlleva? ¡Mírate! ¡Mírame! Solo tengo 19 años, Chifuyu, no me pidas que me tome esto como la mejor noticia del mundo.

— ¿Tú no estás listo? —Masculla entre dientes— ¿Y crees que a los 17 años yo sí?

— Eres demasiado sensible. No estás siendo racional Chifuyu.

— ¡¿Racional?! ¡¿Me hablas tú de racionalidad cuando me estás diciendo que me deshaga de nuestro bebe como si fuera un paquete que puedes devolver sin más?! —Exclama Chifuyu quizás a un pellizco de alcanzar el ápice de su ira— No es la primera vez Ryusei, hablamos tantas veces de formar una familia, ¿Por qué? ¿Por qué ahora me pides eso?

Padre de Alquiler | BajiFuyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora