TODO LO QUE NO QUERÍA (+18) Libro I [EN EDICIÓN]

Malos Hábitos

Holaaa mis amores, aviso este es el capítulo más largo hasta ahora, un regalo para mis niñas del grupo de WhatsApp Leyalovers, que me han apoyado, a veces las chantajeo un poquín pero las amo.
EstefaniArroqui
luciariosdelgado7
Lai_Yuliet
iliag96

Gia

La afirmación me sorprende, es cierto que noté desde la última vez que estuve aquí a esa chica observarme de una forma algo extraña, pero no supe descifrarla, quizás porque estuve todo el tiempo concentrada en otra persona y también es posible que esa haya sido nuestra primera falla.

-¿Que quieres?- pregunto evitando caer en una conversación de dimes y diretes con ella.

-Ya te dije- vuelve a sonreír y se mete el pelo detrás de la oreja- pero puedo ser más clara. Mi padre no tiene porqué enterarse y yo ya tengo toda la información de, porqué estás aquí.

-¿Y por qué estoy aquí, según tú?- sondeo esperando que su respuesta me deje saber hasta dónde ha averiguado.

-Digamos que los gemelos fortachones están de gira- se lleva la mano a la barbilla en un gesto que me impacienta- No sería bonito que el más tonto de los dos tuviera un pequeño accidente que acabara con su carrera- mi corazón se acelera con solo nombrar a mis hermanos.

Saca un móvil y me muestra un par de fotos de Izán e Iván saliendo de algunos lugares, algo que parece un gimnasio, un salón de ensayos y hasta comiendo en una cafetería.

-O peor aún, a los dos, porque... si te soy sincera no sé cuál es cuál- aprieto los puños.

-¿No tienes nada mejor que hacer con tu vida cierto?Ya dime qué mierdas buscas y salimos de esto.

-Me satisfacen algunas cosas y veo que ya nos vamos entendiendo- intenta pasar su brazo encima de mí y la quito de un manotazo.

******

Después del tercer trago que me tomaba y no surtía efecto para llenarme de valor y hacer lo que debía, decidí perdirle algo más al chico de la barra.

-Necesito algo más fuerte, por favor.

-Si estamos hablando de alcohol eso es lo más fuerte que tengo- se encoge de hombros.

-Cualquier cosa, que actúe rápido pero que no pierda el conocimiento- le digo, sabiendo que estoy a punto de hacer la embarrada de mi vida.

Si Amir Vargas se entera puede que ya no quiera volver a mirarme a la cara. Y aunque en mi conciencia pese, tengo que hacerlo, así que tomo la pastilla que me da el chico, logro tragarla con un poco de alcohol y continuo bebiendo.

A los pocos minutos ya todo se siente más liviano y la sensación de felicidad que tiene mi cuerpo y mente no me abandonan, a pesar de que no olvido los motivos de mi cometido, pero extrañamente la culpabilidad ha abandonado mi cuerpo.

Camino hasta el camerino donde debe estar mi amargado favorito. Abro la puerta y lo veo caminando de un lado a otro, tan apetecible como siempre.

-¿Dónde mierda te metiste?- no respondo y me concentro en lo que debo hacer, aunque para mí suerte el esfuerzo es mínimo.

-Me aburrí aquí sola, te demoraste mucho- lo empujo sobre un sillón que hay al fondo, dónde se ve perfectamente el "espejo".

Me siento a horcajas encima suyo.

-¿Qué haces? Tenemos que irnos ya- intenta apartarme.

-Te deseo... Ahora- me restriego encima de su entrepierna y pone las manos en mi cintura.