I Want To Tell You (George Harrison)

87.

CAPITULO 87

-Es normal que sea callado, su madre lo acaba de abandonar con una mujer desconocida,  que aunque seas tu tía no te conocía de nada, esta conviviendo con completos desconocidos, en una casa también desconocida, prácticamente todo es nuevo y desconocido y eso para un niño de tres años debe resultar aterrador, dale unos meses para que se acostumbre. 

Unas semanas después había terminado por llamar a Maureen porque necesitaba de su consejo, y siempre solía darme consejos bastante acertados, le conté por fin sobre Lewis, por fin había perdido me había convencido de que Emily no regresaría arrepentida por voluntad propia, al menos no tan pronto, estaba comenzando asimilar que Lee probablemente viviría con nosotros por meses o incluso por años. Después de contarle la historia de mi Emily y también expresar lo preocupada que estaba por lo silencioso y extraño que era Lee.

-¿En serio lo crees?- preguntó.

-Lo creo, lo que le hace falta es convivir más con niños de su edad.

-No habla con May, al principio ella se intentó acercar pero creo que se rindió y ahora cada quien va a lo suyo. 

-Bueno es que May también es tímida, a la otra me traeré a Jason son de la misma edad y mi hijo es algo inquieto y nada tímido, le hará bien.

-Oh Mo, no sabes lo feliz que me hace escuchar eso, siempre tienes la respuesta a todo, gracias.- le agradecí sintiéndome más tranquila.

Sonrió un poco al escuchar mi comentario pero pronto se le fue la sonrisa, y luego agregó: 

-Oh claro que no,  puedes encontrar esas respuesta por ti sola, además supongo que George puede ser de más ayuda que yo. 

-No se tomó la noticia del todo bien.

Procedí a contarle todo lo que había sucedido con el guitarrista y como se había ido, también la acusación tan injusta que me había hecho.

-Debes admitir que si se vio algo raro que no hubieras hecho nada para detener a Emily. 

-¿le estas dando la razón?

-No, no, bueno supongo que no la detuviste por algo. 

-¿Y porque crees que no lo hice?

-Yo que sé Angie, descúbrelo por ti misma.- me contesto con un tono brusco, pero cuando miró mi rostro su expresión cambio a arrepentimiento.- Lo lamento, eso sonó algo brusco, no debí decirlo así, a lo que me refería es que debes tener tus razones obviamente no deseas que Lewis se quedé sin su madre y tampoco eres egoísta, fue una acusación injusta de su parte.  

-¿Te pasa algo?- pregunté ya que había notado a Mo más seria ese día.- Supongo que no has dormido mucho desde que nació Lee. 

-No, bueno si he dormido menos y estoy algo cansada, pero no es por eso, estoy acostumbrada a no dormir después de dos hijos con corta distancia de años de edad me he acostumbrado... lo que es es que...

-¿Qué?

-Bueno seguí el consejo que me diste el año pasado,  sobre Ringo, y por unos meses todo fue bien, no solo bien, todo fue perfecto y creo que el nacimiento de Lee fue prueba de todos esos meses, pero... últimamente, noto a Ringo algo distante y esta vez estoy segura que no es mi imaginación. 

-¿y que crees?

-No tengo idea- era obvio que mentía estaba claro que podía hacerse una ideas pero no quería decirla.- últimamente he estado bastante ocupado con Lee solo tiene unos meses y él también ha estado ocupado pero siento que apenas me pone atención y no quiero perderlo.