Un don especial (Camilo Madrigal y tú)

20

Dolores no le quitaba los ojos de encima a ____,amiga de Mirabel y Camilo desde el banquillo donde estaba sentada.

Tenía cierta duda que quería aclarar con ella,y pues,al ver la oportunidad, claramente la tomo.

— ¡____! — la llamo,levantando su mano para ser vista.

La muchacha al escuchar su nombre levanto la vista de la fruta que tenia en la mano,miro hacia todas direcciones hasta captar a Dolores.

Dejo la fruta que estaba viendo y que iba a comprar en la tienda y fue hasta ella bastante desconcertada.

— Buenos días,Dolores ¿En qué la puedo ayudar?.

— Hola,____,tanto tiempo. Pues,quería hablarte sobre...un asunto — hizo una seña con sus ojos para que la siguiera, levantándose del banquillo.

— ¿Un asunto? — le pregunto,siguiéndola.

— Si,es sobre... Camilo — la tomo de los hombros y se agacha un poco a su altura. — Está...por así decirlo,un poco raro.

— ¿Raro...?.

— Más de lo normal — aclaró. — Pues... Está...en su mundo,¿Sabes?. Siempre se preocupa por como se ve,¡Eso nunca pasa! — suspiro al ver la cara de confusión de la chica. — Lo que trato de decir es que, Camilo nunca le preocupo por como se ve,o nunca se preocupo de bañarse — ____ sonrió divertida. — O ponerse perfume,nunca lo hizo. Pero creeme,no me molesta,pero no es normal.

— Entonces...¿No quieres que Camilo se bañé...?

— ¡No! O sea,si,quiero eso,pero...no sabrás...por decirlo así...¿Algo?.

— ¿Algo? — pregunto lentamente.

— Si,algo,sobre si ve a alguien o...no sé.

— No que yo sepa — respondió ____, soprendiendose por el tono que de repente optó su voz.

— Uhm...Mira — la miro a los ojos. — Se que ustedes están...haciendo algo o tramando algo,junto a Mirabel,pero como no quiero ser metiche,pues,lo dejo pasar, pero por favor ____,si sabes lo que le pasa a Camilo,por favor búscame en seguida. — la chica la miro con una mueca unos segundos antes de asentir.

— Comprendo,no se preocupe Dolores,yo le aviso.

— Gracias — le dió unos golpesitos en su cabeza de forma cariñosa antes de irse.

— ¿Camilo?...— se llevó una mano a su mentón,antes de reírse. — ¿Cómo que no se bañaba antes?.

°•°•°•°

— No puede ser...

Se ocultó tras la pared de una casa con el corazón a mil. Se había encontrado con su hermano en la verdulería,por suerte, este ni siquiera le había prestado atención por estar hablando con la atendedora sobre la verdura.

Al ver quién era,____ se fue casi corriendo del lugar,intentando con sus fuerzas pasar desapercibida,logrando escapar así con éxito mientras se escondía tras una casa.

— No puede ser...eso estuvo tan cerca...

— ¿Tan cerca de que? — la castaña pego un salto y un grito, llevándose su mano a su pecho al descubrir que era Camilo quien la había asustado.

— ¡Camilo,no me asuste así!.

— Perdón,sumercé — dice entre risas. — Ya, cuénteme que le pasa.

Al recordar lo sucedido,la castaña se acercó hacia el muy cerca y le susurro al oído.

— Me acabo de encontrar con mi hermano. — Camilo pego un salto.

— ¿¡Cómo!?.

— Shh — le chisto. — Por suerte no me vio, pero estuvo cerca. Lo que más me preocupa es que vuelva a suceder,y está vez no tenga suerte — se mordió levemente el labio pensativa. — Camilo,¿Y si me reconoce?.

— ¿Qué?.

— Hablo de que...si llega a verme,¿Crees que me reconocerá? Si,el también era un niño cuando paso todo esto,pero,si mal no recuerdo,el me pasa unos ocho años. Es obvio que me debe de recordar — largo un suspiro desesperante,antes de caer al suelo con los pies estirados.

— Sumercé,no haga eso,que me asusta — dijo rápidamente Camilo,que al ver cómo cayó la chica,se asusto bastante.

Se sentó al lado de la chica y quedaron en un cómodo silencio varios minutos antes de que ese silencio sea interrumpido por Mirabel.

— ¡Ah,ahí están! — se acercó a ellos y los miro extrañados. — Vengo a hacer nada con ustedes — y se sentó entre ellos dos.

— Ah,hola,Mirabel.

— Hola,____ ¿Cómo estás?.

— Bien...

— Acaba de ver a su hermano,claro que no está bien — interrumpió Camilo.

La chica lo miro con los ojos abiertos antes de darle un ligero golpe en el hombro.

— Uh,eres un chismoso.

— ¿Viste a tu hermano?.

— Se encontró con su hermano — la chica le chisto.

— ¡Camilo!.

— ¡Perdón,sumercé! Se me escapa.

— ¿¡Encontrarte con tu hermano!? — se acomodo para verla mejor —. ¿O sea que ya sabes cómo es su aspecto?.

— Claro que si ¿Acaso...? — frunció el ceño —. Ya sabía su aspecto hace una semana, ¿No sabías?.

— Eh,no — dijo obvia —. ¿Lo sabías y no me dijiste?.

— Yo...pensé que Camilo te dijo — miro acusadoramente al de rulos.

— Y yo pensé que tú le dirías a Mirabel — la chica largo un suspiro desesperante.

— Lo siento,Bel — dijo apenada —. Pensé que sabías.

— Ya...— se hizo la ofendida mirando hacia otro lado —. Pero volviendo al tema,¿Dónde lo encontraste?.

— En la verdulería,me lo cruce. Bueno, creo que el no me vio,pero estuvo a punto.

— Oh,wow.

— Si...

— Entonces...

— Entonces es hora de que me presenté formalmente con el...

Los dos Madrigal largaron un jadeo y la miraron.

— ¿Qué?.

— ¿En serio?.

— Pues...si,o sea. Ya lo ví,sé cómo es,sé cómo se comporta,sé cómo es con la gente. No es un mal tipo,no creo que... reaccione mal,si me ve...

— Bueno...

— Si...no creo que sea mala idea...