Un don especial (Camilo Madrigal y tú)

25

— Bien,ya le envié la carta — dijo Bel con una sonrisa.

— ¿Y-Ya? — tartamudeo ____ —. Pero...

— Si no lo hacia ahora,nunca lo ibas a hacer ____,creeme,te hice un favor — coloco sus manos en su cintura como habitualmente lo hacia cuando regañaba a alguien.

— Bien,bien...¿A qué hora debo ir para allá?.

— A las cinco en punto — Romero asintio pensativa.

— Bien...bien...

— ¿Oye y Camilo? — pregunto mirando detrás de la chica buscando a su primo.

— Pasamos por una tienda de comida y se quedó ahí,de seguro ya viene.

— Ay,no. ¿Lo dejaste ahí? Va a estar media hora comprando y comiendo,mejor vámonos para allá a traerlo — tomo la mano de la chica y la llevo.

Ya había pasado eso,pasaban por una tienda donde vendían cualquier tipo de comida y Camilo se quedaba ahí,les decía que en un minuto iba pero siempre se quedaba media hora o más.

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— Debe estar por aquí — dijo rascándose la cabeza angustiada.

Cuando llegaron,no encontraron a Camilo en la tienda ni por los al rededores. Mirabel ya se estaba impacientando porque se les iba a hacer tarde y todo por culpa de Camilo.

— Lo voy a matar — dijo entre dientes.

— No te preocupes,de seguro lo encontramos por aquí...— se detuvieron las dos al mismo tiempo.

Camilo estaba sentado en forma de indio, con las manos juntas y ahí apoyada su cabeza mientras miraba un plato de comida que estaba tirado por todo el suelo.

Las chicas ya se dieron una idea de lo que pasó,el chico quiso llevarse el plato de comida y habrá tropezado,haciendo que cayese todo.

— Oh,no...— dijo Mirabel.

Pero ____ al ver esta situación,no pudo evitar reírse como loca,muy raro en ella. Se tomó el estómago de tanto reír.

Camilo al escuchar la risa,miro hacia la chica sorprendiendose. Nunca la había escuchado reírse así,por lo que empezó a reírse también de su desgracia y Mirabel se sumó a eso.

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— ¡Bien! No más distracciones — Mirabel se paró delante de los dos — ¡Hoy va a hacer el día donde te reencuentres con tu hermano! — señaló a la chica —. Lo siento en mis venas,hoy es el día parceros — los tomo a los dos por los hombros y los apretujo —. Hoy es el día — sonrió.

— Eh...

— Si,claro...

— ¡Bien! — los soltó — ¿Trajiste lo que te pedí?.

— ¿Qué cosa? — pregunto confundida.

— Lo...lo que te pedí — ____ la miro sin entender — ¡El...el libro!.

— ¿Me dijiste que traiga el libro?.

— ¡Le dije a Camilo que te dijera que traigas el libro! — las dos miraron a Camilo.

— Ah...con razón presentía que olvidaba algo...— sonrio avergonzado.

Mirabel respiro profundamente cerrando los párpados lentamente,conto hasta tres en su cabeza y soltó el aire.

— Bien...bien...____,¿No me haces el favorsico de buscar el libro? — pregunto con los ojos bien abiertos.

— Eh...— la chica la miro unos segundos antes de asentir temiendo que en cualquier momento la chica explote.

Dejo su bolsa en el suelo mientras iba corriendo a su casa ha por el libro.

No tardo tanto en llegar a su casa,lo que si tardo fue en buscarlo porque no sabía dónde lo había dejado. Después de cinco minutos de desordenar toda su habitación la encontró debajo de su cama dentro de una caja. Así que salió disparada de la casa.

Estaba yendo tranquilamente agitada por tanto correr,inspeccionando el libro aunque ya lo había visto todo de pies a cabeza,que cuando levanto la mirada, su sangre se helo por completo.