Mi África [Cha Eun Woo y tú]

Capítulo 19.

— T/N, ya llegamos— la movió despacio para que despertara, pero ella se quejó acurrucándose más— Hace cinco minutos que estamos afuera de la casa, vamos, despierta.

— Creo que no se va a despertar— intervino el taxista— ¿Y si lleva cargando a su novia?

— Oh, no es mi... no es una mala idea— no iba a discutir con el señor el tipo de relación que mantenían, aunque la verdad era que no le había desagradado en lo más mínimo cómo se escuchó eso.

Le pagó al chofer y puso la bolsa en su antebrazo para salir del auto; rodeó el coche y acunó en sus brazos a la castaña.

Pudo observar cómo se acomodó la melena de la chica contra su pecho, podía ver su perfecto perfil.

Mientras subía por el elevador, se había dispuesto a patear la puerta varias veces pero para su sorpresa, sólo ocupó de un leve empujón para que ésta se abriera.

— ¡Por fin llegas!

— ¿Y tú qué haces aquí?

— Observo cómo cargas a mi prima, ¿Está pesada verdad?

— No, hasta puedo jugar a hacer pesas con ella.

— Lo que hace el amor— suspiró extendiendose en el sillón, como si fuera su casa, verdaderamente Sanha era todo un confianzudo.

— ¿Y MJ?

— Está poniendo el carbón; me mandó a picar todo, pero, me da hueva.

— Dejo a T/N en el cuarto y vamos a picar.

— Contigo...— lo miró pervertidamente— Estás carita y todo pero no gracias, no eres mi tipo, me gustan más como Bin.

— Eres un asco... espera... ¿hablas del mismo Bin que conozco? ¿El hermano de MJ?

— Sí, es todo un papucho...

— ¿Y por qué lo conoces o qué?

— Cuando llegué, MJ estaba haciendo videollamada con él y con su otro hermano...— sorbió su nariz para luego rascarla— Juan o algo así— chasqueó sus dedos al recordar el nombre.

— JinJin— corrigió.

— Ese mero, también muy guapo él, no entiendo porqué los dos hermanos del Myung-jun están mamadísimos y él es una macita.

EunWoo prefirió no decir nada y se fue de la sala riendo con la chica en sus brazos.

Como pudo, abrió la puerta de la habitación y la acostó en su cama destendiendo las sábanas a su paso.

Parecía tan tranquila; respiraba lento y suave, le era imposible no admirar su belleza; se acercó a su cara, tanto que podía sentir el aire que exhalaba en su frente.

Se moría por darle un beso, pero no podía ser de esa forma, no mientras ella no estuviera consiente de lo que estaba pasando.
Pero... ¿uno en la frente no haría daño verdad?
Era uno limpio e inocente.

Se aproximó más a ella levantando levemente los labios y los estampó delicadamente en la tersa piel de su frente.

— ¡Hey!— el mayor gritó tan fuerte que hizo despertar a la chica de golpe haciendo que chocara bruscamente contra la cabeza del menor.

Ella se cubrió la frente con su mano y el pelinegro la boca, le estaba empezando a brotar sangre de su su labio inferior.

— ¿Qué está pasando aquí?— preguntó T/N totalmente desubicada sobando su cabeza.

— Yo vine a ver por qué Nunu se tardaba tanto— se explicó MJ.

— Sabe a fierro— se quejó mientras salía corriendo al baño para enjuagar su boca y huir de la incómoda situación, no tenía contemplada la idea de decir qué estaba haciendo en realidad cuando entró MJ.