05

819 112 29
                                    

Aquel día, poco después de haber adquirido negatividad del genocida, se tomó un descanso largo y duradero de una semana en su mundo corrupto, estaba comenzando a sentir esa frustración.

No podía detectar a su pintor, no sentía emociones negativas de su parte, cerro los ojos recostando cómodamente su espalda en los restos de su madre.

Cerrando sus cuencas, nuevamente disfrutando de ese ambiente pesado y tan solitario, oyó un portal abrirse, pero tampoco eso lo distrajo...

Espera... Killer no podía abrir portales.

Abrió las cuencas.

Tanto lo busco para que llegara literalmente al mismo lugar donde se conocieron, a su mundo, claro la diferencia era que este estaba tan corrupto al igual que él, el pintor estaba dándole la espalda, mirando a las criaturas deformes pelearse entre sí, gruñéndose como si de animales se tratara.

Suponía que eso lo asustaría, pero su rostro mostraba una fascinación por lo que espectaba, quizá no pudo regresar porque la negatividad era demasiada y lo dispersaba, era una opción.

Al ver que iba a avanzar.

Lo llamo, aun así estaba con dudas si hacerlo, pero había pasado tanto, ignoro por el momento que por su apariencia actual no lo reconocería.

Se incorporó rápidamente y se acercó.

— ¡Ink!

— ¿Quién me llama?

El guardián se giró rápido, pero sin mostrarse en alerta, bastante confiado, incluso el ser negativo sonrió con solo oírlo preguntar aquello hasta que al fin, después de más de quinientos años, sus miradas se conectaron.

Estaba igual desde el primer día que lo vio, con esas pupilas tan mágicas y coloridas que lo hipnotizaron y aquella actitud tan despierta que lo atrajo.

Le encanto verlo nuevamente, sentía una... Alegría enorme, no, no era esa alegría por hacer daño, no había malicia, era algo demasiado bueno para un ser que desde su corrupción fue hecho maldito.

Aunque claro, Nightmare rápidamente noto que la mirada de Ink al verlo fue de sorpresa, así que no le dijo nada más e ignoro su pregunta y sin darle más tiempo, uso uno de sus vectores para enredarlo en todo su torso, sin ser agresivo, pero si de forma firme, levantándolo del suelo.

Antes, aunque lo hubiera intentado, no hubiera conseguido detenerlo, pero ahora las cosas eran distintas, tenía fuerza, una increíble habilidad de influenciamiento en los sentimientos, dejo de ser alguien ingenuo... En un momento se arrepintió de lo que hizo, pero agradeció que el pintor, lejos de asustarse, aquello fue tomado color un juego, reía por el movimiento de ser levantado, olvidando que tenía que explorar ese “nuevo universo”.

Todo estaba bien...

Ink no parecía tenerle.

No lo estaba lastimando.

No tenía en mente hacerlo.

Incluso él sentía esa felicidad.

Se sintió tan feliz, en paz y pleno, en ese momento... No había modo de sentir algo malo...

La negatividad de su cuerpo comenzó hacerse sólida, cayendo al suelo de forma rápida, ¿qué sucedía? Comenzaba a sentirse mareado, incluso más débil, aunque lo que le preocupo es que el vector que sostenía a Ink se deterioraba y antes de que pase, lo bajo soltándolo.

Intento mantenerse rígido, pero se mareó y se sentó torpemente en el suelo.

Tenía miedo de espantarlo con esa escena, literalmente su cuerpo se estaba cayendo en pedazos, pero no, el de pincel enorme se quedó viendo la escena, hasta ver que bajo de esa oscuridad líquida, había un esqueleto de huesos blancos y ropas moradas desgastadas, totalmente viejas y destrozadas.

— Wow... ¿Qué te paso?

Ink se aproximó y se acercó, ofreciéndole su mano para que se levantara.

— Vamos, párate.

— I-Ink...

Quien diría que bajo de todo eso, estaba aquel esqueleto tímido y cohibido, que fue humillado y golpeado por los que alguna vez fueron amigos de su hermano menor.

El de corona dorada, tomo su mano, temblando de la emoción de sentirlo nuevamente tocándolo.

Le fue muy complicado expresarse, estaba con muchos mareos por haber vuelto a su antigua forma, pero Ink lo estuvo ayudando, pudieron hablar y con mucha decepción y tristeza, Nightmare pudo notar que el ajeno no lo recordaba, incluso a pesar de haber vuelto a su forma no corrupta, seguía sin haberlo reconocido.

Pero, estaría bien, estaba con su amado luego de siglos, sin siquiera haberlo visto, sin tocarlo... Pensando incluso que en su soledad y desespero su mente creo algo ficticio para consolarse de la agonía, de no ser apreciado a diferencia del guardián de los sentimientos positivos.

Pasaron mucho tiempo juntos, esta vez Nightmare logro mantener a Ink consigo, o tal vez algo cambio.

Aún no se sabrá.

Conoció mejor a su amado, entendiendo por fin por qué sus emociones se sentían tan distintas, usaba viales, ahí podía sentir sus emociones encapsuladas, podía sentir si estaba triste, pero no se podría alimentar de él, ni siquiera un poco, por lo que Ink al enterarse de que era una entidad que se alimentaba de los sentimientos negativos, tenía la certeza que no podría usarlo de alimento de ninguna forma.

Nightmare al conocer de su amado pintor, su carencia de alma y de ese lado neutral que podía llegar a tener si no tomaba la pintura de sus viales, fueron detalles que decidió no tomar en cuenta, él no tenía tampoco un alma como tal, solo un aura negativa.

Pasaron los meses y ambos se comenzaron a tratar mejor y sin notarlo, incluso Ink comenzó a querer pasar más tiempo junto a Nightmare, yéndolo a visitar de forma regular, hasta que formalizaron esa relación a petición del de aura.

¿Qué haría con Ccino?

No habría problema, no podría hacerle alguna escena, tampoco tenia como enterarse al no poder salir de su cafetería.

Realmente en todo ese tiempo no fue a verlo y se dejó llevar por ese amor, a las semanas comenzaron a vivir juntos, en una casa que flotaba en el multiverso, a la cual únicamente ellos conocían el código de acceso.

Como adoraba Nightmare sentirse amado por el otro, pero tampoco era de su agrado ser empalagado, el lado neutral de Ink ayudaba a equilibrar aquello.

Ellos tienen labores que deberían de cumplir si o si, el rey podía volver a su manera corrupta, la cual usaba para poder seguir con sus trabajos... Claro, tuvo que modificar su modo de actuar, Ink no permitía alteraciones permanentes, pero tampoco dejaría a su pareja morir de hambre, así que mientras no causará un daño permanente, Ink consentía esas acciones.

Aunque al estar en intimidad, aquel ser lleno de negatividad líquida, se desprendía de la misma, dejándose expuesto e indefenso bajo Ink, mostrándole su lado más sumiso y entregado.

No tenía porque dudar.

Fue correspondido

Y aunque no lo hubiera sido.

Por amor se hace todo.

¿Cierto?

Amor, un sentimiento neutral, quizá por eso Nightmare es capaz de sentirlo al igual que su hermano menor, siendo auras negativa y positiva, respectivamente.

No entendía si fue bendecido o maldecido por ser capaz de experimentarlo, sufrió mucho cuando Ink no regreso a verlo, aun cuando estaba corrupto se estresaba y frustraba por no tenerlo consigo, dudando inclusive de la existencia de su ahora pareja.

De alguna forma la rutina, los afecto, quizá era algo más.

Nightmare después de su corrupción no volvió a ser del todo el mismo, conservaba esa esencia, el amor por Ink.

Pero seres tan complejos como ellos. Necesitaban más para que eso funcione porque... Si.

Puede que las cosas no sean de todo buenas para esta pareja.

❝Eternidad❞ ©Where stories live. Discover now