BEBÉ, EL CIELO ESTÁ EN TUS OJOS. ➸yoonmin

Capítulo 11

Yoongi gruñó cuando escuchó el timbre sonar en la planta baja, no estaba de ánimo para hablar con nadie ya que tenía a una chica de cabello oscuro de rodillas frente a él con los labios alrededor de su polla y chupando como si su vida dependiera de ello. Miró su reloj de pared, la escuela había terminado hacía media hora, así que debía ser Jungkook o Namjoon porque su madre tenía turno hasta medianoche.

—Tal vez deberías abrir. —dijo la chica en voz baja.

Pero Yoongi enredó los dedos en su cabello y empujó sus caderas hacia adelante para atragantarla diciéndole que se callara y terminara su trabajo.

Se corrió en su boca treinta segundos después, justo cuando el timbre sonó por segunda ocasión.

—Deberíamos hacer esto de nuevo. —habló ella mientras se ponía la ropa.

Yoongi asintió, a pesar de que no sabía ni su nombre. Sabía que iba con él en clase de inglés... o francés, daba igual.

—Tal vez la próxima vez tú me hagas algo. —propuso ella mientras Yoongi la guiaba escaleras abajo solo en bóxers.

—Tal vez. —contestó, y abrió la puerta para ella, revelando a su amigo de pie en la puerta con un six-pack de cerveza.

—Hola. —Jungkook saludó con una sonrisa torcida.

La chica solo sonrió antes de marcharse.

—¿Quién era esa?

—No tengo ni puta idea. —Yoongi respondió, y cerró la puerta detrás de Jungkook antes de dirigirse a la estrecha sala para sentarse en el sofá.

Jungkook puso las cervezas en la mesa de centro y sacó una cajita de metal que llevaba la etiqueta "NO es hierba".

—Bonito chupetón, por cierto —halagó a Yoongi señalando su cuello, justo debajo de la barbilla. Era del tamaño de un puño y ambos sabían que no desaparecería en unos días—. ¿Tiene la boca grande entonces?

—Seh.

Yoongi se rió mientras abría una lata. —¿Qué vamos a hacer esta noche?

—Vamos a salir.

—¿A dónde?

—Rockies.

—¿Quién viene?

—Namjoon, Seokjin, Taehyung, y Jimin probablemente.

—¿Jimin?

—Sí, es más agradable de lo que creíamos.

—¿Sigues tratando de meterte en los pantalones de Taehyung? —preguntó mientras Jungkook armaba dos porros.

—Mhm —asintió—. Aunque no será tan fácil, es un riquillo virgen.

—Pero eso lo hace más divertido.

—Lo sé.

Jungkook le entregó el porro a su amigo antes de encenderlo con la misma flama y ponerse cómodo en el sofá. —Namjoon me dijo que el baile de invierno de la escuela privada es el mes que viene.

—¿Y?

—Va a ir con Seokjin.

—Ja, me gustaría verlo en esmoquin. —rió sintiendo cómo la droga lo invadía.

—Deberíamos colarnos.

Yoongi sonrió ante la idea, le encantaría ver el shock en el rostro de Jimin cuando los viera vestidos con ropa normal entrando a su elegante baile. —Definitivamente deberíamos.

Jungkook observó a Yoongi darle otra calada a su porro antes de acabárselo unos minutos más tarde, riéndose porque recordó algo que Namjoon le había contado. —Deberías haber ido a la escuela hoy.