Capítulo 23

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Jimin fumó el porro con su mano derecha, sosteniéndolo entre dos dedos mientras hablaba con Taehyung. Se levantó unos minutos para que Sihyeon pudiera sentarse al lado de Juria y compartir su porro. Él terminó apoyado en la pared en medio de Yoongi y Namjoon, quienes ya estaban riéndose de algo que un profesor había dicho.

Sonrió de oreja a oreja, sintiendo la droga empezar a hacer efecto lentamente.

Yoongi ya se había terminado su porro, y ahora le estaba pidiendo a Jimin el suyo.

—¡De ninguna manera! No te daré el mío

—Pero podemos compartir.

—Bien.

Jimin aceptó solo porque estaba drogado y demasiado mareado como para rechazarlo. Yoongi terminó fumándoselo todo de todas formas, porque él tenía una mayor tolerancia a las drogas.

—¿Te sientes más caliente ahora? —le preguntó, con una mano descansando en el muro del lado de la cabeza del chico y la otra en su bolsillo.

Jimin asintió tímidamente y enterró sus manos en los bolsillos de la chaqueta.

—Pero yo tengo frío —Yoongi hizo un puchero burlándose, después se rió y se inclinó hacia su oído para poder susurrarle—: Tal vez tú puedas mantenerme caliente una vez que estemos adentro, ¿hm?

—Eh... Pero estarás caliente una vez que estemos dentro.

Yoongi negó, divertido, antes de dar un paso hacia atrás y pasar una mano por su cabello.

A la 1:30 a. m. todos volvieron a sus habitaciones; Juria se fue con Sihyeon, Jungkook con Taehyung y Namjoon con Seokjin. Lo cual dejó a Jimin preguntándose dónde dormiría Yoongi.

—¿Dónde vas a dormir? —preguntó cuando todos ya estaban en sus habitaciones y ellos estaban en el pasillo.

—Voy a tomar el sofá. De todas maneras, es más cómodo que la cama de mi casa.

Jimin se sintió un poco mal por él.

—¿Cómo siquiera hiciste para entrar al hotel? —cuestionó.

—Bueno, Namjoon nos metió pero también me acosté con la mujer de la puerta.

—¡¿Qué?! —exclamó Jimin sorprendido, y un poco... celoso.

—Me la follé. —Yoongi respondió y se quitó los zapatos cerca del sofá para seguidamente sentarse.

—¿Cuándo?

—No recuerdo, ¿hace como un par de meses?, creo.

—Ella es vieja.

—Tiene veintiséis.

—Eso es viejo.

—Tú ni siquiera eres legal todavía, así que no creo que debas estar hablando mierda sobre los adultos. —Yoongi contestó y rascó las pulseras de su brazo izquierdo distraídamente.

—Cállate. —fue el único contraataque que Jimin pudo pensar.

Yoongi negó con la cabeza y miró fijamente a Jimin por unos segundos, sus ojos enrojecidos recorriendo el cuerpo del chico de arriba a abajo. Entonces, Jimin procedió a quitarse la chaqueta y la puso en el sofá al lado de Yoongi.

—Gracias por eso. —le dijo.

Yoongi simplemente asintió, y se levantó para quitarse la camisa y los pantalones.

Jimin no se movió, él solo estaba mirando, una vez más sintiéndose atraído del increíble cuerpo de Min Yoongi.

—Puedo verte observándome. —le informó Yoongi mientras estiraba los brazos sobre la cabeza y los ponía detrás de él.

BEBÉ, EL CIELO ESTÁ EN TUS OJOS. ➸yoonminOnde histórias criam vida. Descubra agora