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Abrí la puerta y Jungkook entró tras de mí como si fuera su casa. No era la primera vez que estaba allí, así que no me molestó en absoluto que se diera tal libertad de sentarse en mi sofá.

-Podrías decorarlo, ¿Sabes?

-¿El apartamento?-pregunté abriendo la nevera.

No respondió, supuse que fue una estúpida pregunta. Saqué unos San Jacobo de la nevera y los puse en la encimera.

-No sé qué poner.

Saqué la sartén del armario de abajo y la puse en la vitrocerámica.

-Decóralo de acuerdo a tus gustos.

Encendí el fuego sonriente.

-No lo iba a hacer con los tuyos.

Agarré el aceite echándolo en la sartén. Me gustaba hablar con Jungkook, me sentía extrañamente cómoda.

-¿Me copias el sarcasmo, Avery?

-Puede.

Me di la vuelta sonriente esperando encontrarme el ceño fruncido de Jungkook en el sofá, pero se había acercado silenciosamente, lo tenía literalmente tras de mí, a menos de un metro. Se sentó en la encimera mirándome fijamente. Tragué en seco y volví la vista al aceite. Comencé a hacerme la comida sintiendo la mirada de Jungkook tras de mí, ¿Cómo tenía tanta presencia?

-¿Te sientes liberado?-pregunté dando la vuelta a mi comida.

-¿Liberado de qué?

-Ya no tienes que ser el Jungkook tímido.

Escuché una pequeña risa tras de mí.

-Avery, ¿Crees que me conoces?

Me di la vuelta negando. Era consciente de que no tenía ni idea de él.

-Pero estoy deseando hacerlo-dije sin pensarlo.

Jungkook levantó las cejas tras mi comentario. Yo analicé mi respuesta y me sonrojé. Desvíe la mirada con urgencia y me di la vuelta para seguir con mi comida.

-También me gustaría conocerte, Avery Alcott.

Me tensé al sentir como agarraba uno de mis brazos y tiraba de mí hacia atrás. Me giré sorprendiéndome al ver una enorme sonrisa en su rostro.

-Me agradas.

-Gracias-murmuré.

-Sé que no es unas palabras muy profundas-desvió la vista hacia mi nevera-Pero, ¿Sabes cuántas personas me agradan?

Negué con la cabeza. Suponía que Taehyung era una, debía serlo, luego...Nury obviamente no, ¿Cómo se llamaba su prima que no era su prima? ¿Hyorim?

-Taehyung y tú, sólo vosotros me agradais.

-¿Y Hyorim?

Parecía sorprendido. Se quedó mirándome como si esperara a que me rindiera con el tema. Señaló la sartén tras de mí, maldije dándome la vuelta para atender a mi comida. La puse sobre un plato y busqué los cubiertos.

-Hyorim no me agrada, sólo me conviene. No preguntes de qué la conozco, tampoco a dónde iré en la noche con Taehyung. Esa parte de mi vida está completamente bloqueada para ti, por ahora.

-Me quitas la diversión -dije dejando en la encimera mi comida.

Corté un pedazo y le señalé con este pinchado en el tenedor.

-¿Y podemos hablar de la apuesta?

Jungkook estiró el cuerpo hasta conseguir llevarse de mi tenedor el trozo que había cortado. Miré con la boca abierta mi tenedor, ¡Mi comida! ¡Ladrón! Asintió como respuesta a mi pregunta y afirmó que estaban buenos. Se bajó de mi encimera dirigiéndose al sofá.

Giants - JungkookWhere stories live. Discover now