𝑯𝒆𝒍𝒍 | 𝑬𝒅𝒅𝒊𝒆 𝑴𝒖𝒏𝒔𝒐𝒏

𝑻𝒓𝒆𝒊𝒏𝒕𝒂 𝒚 𝒐𝒄𝒉𝒐

⚠️Este capítulo contiene lenguaje explicito, escenas sexuales y sexo oral.

⚠️Leer con responsabilidad

⚠️Estos capítulos no afectan a la trama, si no te gustan o te incomodan puedes pasarlo.

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Como era de esperar Eddie y yo llegamos tarde a la escuela por haber estado teniendo sexo durante toda la noche; a pesar de eso lo noto bastante inquieto durante el camino al instituto, nada más llegar bajamos rápido de la camioneta para dirigirnos a nuestras clases.

Las primeras horas de la mañana se están haciendo eternas, quiero ver a Eddie a pesar de haber estado toda la noche con él pero es extraña la sensación de echarlo de menos a cada segundo.

El timbre me saca de mis pensamientos y rápidamente recogo mis cosas para dirigirme hacia el comedor, me muero de hambre; espero la fila pacientemente y una vez tengo la bandeja de comida en mis manos me dirijo hacia la mesa de Hellfire junto con los demás chicos.

Realmente me extraña no ver a Eddie con ellos, su lugar está vacío y eso me preocupa un poco.

—¿Donde está Eddie?—pregunto nada más llegar ocupando el sitio de mi novio—Es raro que no haya venido a comer con vosotros—añado metiendo un pedazo de pizza en mi boca.

—Ha ido a entregar un encargo, supongo que volverá antes de que acabe la hora del almuerzo—responde Mike restándole importancia a lo que yo asiento.

Decido no pensar mucho y continuo comiendo mientras hablo con los chicos, hoy tienen día de campaña y en esos días Eddie anda más inquieto de lo normal, tal vez por eso estaba así esta mañana.

El timbre suena indicando el final del almuerzo, me despido de los chicos y recogo mi bandeja; salgo del comedor y comienzo a caminar por los pasillos para dirigirme hacia el baño, me intriga mucho saber dónde está Eddie así que me quedaré aquí un rato para hacer tiempo.

Una vez creo que no hay nadie por los pasillos salgo del baño en dirección hacia el la sala que tienen los chicos para jugar a D&D, siendo día de campaña segurísimo que Eddie debe de estar ahí.

Toco la puerta varias veces sin recibir respuesta así que opto por abrir directamente encontrándome a Eddie concentrado mirando algunos libros del juego.

—Joder, llevo buscándote toda la mañana, Edward—ruedo los ojos cerrando la puerta—¿Piensas faltar a clases para preparar la campaña de esta noche?

—Obvio, además en matemáticas voy bien gracias a ti—responde burlonamente levantando la vista de los libros para mirarme de arriba a abajo—Uhm, esa falda te queda muy sexy, no me había dado cuenta.

—¿Eddie?—rio levemente viendo cómo se acerca a mi—¿Estas bien? Te noto demasiado inquieto, es por la campaña ¿No?

Él niega con una sonrisa pícara mientras se acerca a mí y agarra mi cuello suavemente acorralandome contra la pared, Eddie comienza a besar mi cuello ligeramente hasta llegar a mi boca.

—Pasa que no me canso de hacerte mía las veces que quiera, nena—murmura con voz ronca haciéndome suspirar—Ademas, tengo unas ganas de follarte hasta que me canse desde esta mañana....

Sus boca ataca la mía dejándome totalmente noqueada pero a penas unos segundos después correspondo el beso llevando mis manos hacia su nuca pero Eddie me lo impide agarrando con una mano mis muñecas poniéndolas sobre mi cabeza dejándome completamente inmovilizada.